Los trabajadores de la autopartista Mahle reclamaron ayer a los dirigentes de la Unión Obrera Metalúrgica un "mayor protagonismo" en el conflicto desatado el 24 de abril pasado por el cierre de la planta de Rosario. Los trabajadores entregaron a la dirigencia sindical un petitorio que exige un paro nacional de 24 horas, así como fondos para movilidad y medicamentos. En ese clima de máxima tensión, el ministro Carlos Rodríguez advirtió verbalmente a los representantes de la empresa alemana que concurran a la audiencia prevista para hoy. Como la presencia fue confirmada, esta mañana obreros y empresarios se verán las caras. En tanto, no hay novedades sobre el traspaso de la fábrica de aros de pistón de Perón al 5600 a otra firma. "Que Mahle aduzca no tener dinero para pagar salarios no lo pueden creer ni mis nietos", dijo Rodríguez sobre los argumentos empresarios para pagar sólo 200 pesos de la segunda quincena de julio.

Allegados a la multinacional alemana confirmaron ayer a este diario que el gerente de Recursos Humanos de Mahle, José Serra, participará de la audiencia en la sede local de la cartera laboral, en San Lorenzo y Ovidio Lagos, junto a un abogado. Allí, y en el marco de la conciliación voluntaria que vence el 31 de agosto, deberán informar los avances de las negociaciones con el gobierno nacional por el traspaso de la planta.

Además, los representantes de la empresa tendrán explicar por qué sólo se abonaron 200 pesos de los salarios correspondientes a la segunda quincena de julio. Esta situación generó el enérgico reclamo de los operarios rosarinos que instalaron una carpa en la fábrica de válvulas que Mahle tiene en Rafaela para exigir el pago de sus haberes, y lograron la solidaridad de sus pares rafaelinos. En esa ciudad, los operarios pararon durante 24 horas en solidaridad con los rosarinos.

Los empresarios argumentaron a través de una nota, porque se negaron a participar de la última audiencia que pagaron esa pequeña suma a cuenta del sueldo porque no disponían de fondos suficientes, ya que no cobraron los créditos fiscales por la devolución del IVA. "Esto no se lo creen ni mis nietos", disparó ayer el ministro Rodríguez en declaraciones televisivas.

"En primer lugar Mahle incumplió con un acta firmada por ellos mismos de pago de salarios y se limitó al pago de los miserables 200 pesos, por otro lado no acató la reunión que teníamos prevista. Le pedimos una nueva reunión el lunes al ver que los trabajadores de Mahle Rosario se instalaban en Rafaela y también se negó a asistir", precisó el funcionario.

Para ir entrando en clima, un grupo de operarios de la fábrica de aros de pistón de la zona oeste de la ciudad marchó ayer hasta la sede local de la UOM para entregar un petitorio de cuatro puntos, y exigirles "un mayor compromiso" en el conflicto que comenzó el 24 de abril cuando los alemanes comunicaron su decisión de cerrar la planta, dejando en la calle a cerca de 500 operarios.

En diálogo con Rosario/12, Mónica Piccioni, una de las trabajadoras de Mahle que participó de la reunión con algunos integrantes de la comisión directiva de la UOM, sostuvo que la misma "fue positiva, no pensaron que íbamos a ir con semejante petitorio. Conseguimos algunas cosas que pedimos, como el tema de los colectivos, plata para un compañero que está en Rafaela y tiene al hijo enfermo, y para otros compañeros que viajaron hoy (por ayer) para allá".

Piccioni dijo que además de los reclamos incluidos en el petitorio, solicitaron que un representante de la UOM acompañe a los operarios que instalaron la carpa en Rafaela. "Nos quedó pendiente el tema de los paros. Ellos argumentaron que legalmente no pueden manejar el tema, porque tienen que conversarlo con la gente de Buenos Aires. Por eso tenemos pensado viajar el lunes o martes para hablar con (Antonio) Caló", apuntó.

La empleada de Mahle destacó la solidaridad de los empleados de la fábrica de válvulas de Rafaela, que continúan sin entrar a trabajar. En este sentido, el ministro Rodríguez dijo que habían acordado que la empresa iba a permitir el ingreso de los trabajadores "y sin embargo no lo permitieron, en un verdadero lock out patronal".