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La Federación de Cooperadoras Escolares insistió con la reapertura de la cocina centralizada y se ofreció al Estado provincial y municipal utilizar la misma infraestructura en la que funcionaba hace más de diez años. Indicaron que se trata de un espacio en desuso, donde el organismo únicamente ocupa las oficinas. Gustavo Mogues, presidente del organismo, indicó que se trata de un lugar importante y que está disponible "para poner en marcha un gran comedor, que le dé de comer a todos quienes asisten a los comedores escolares de Rosario", para "sacar" esos espacios de las escuelas.

Hace casi un año, cuando comenzó la actual gestión de Cooperadoras Escolares se viene proponiendo a diferentes organismos del Estado que reabra este lugar que, según consideró Mogues, con una mínima inversión podría ponerse en funcionamiento. "Hemos hablado y ofrecido el espacio a gente de Desarrollo Social de la provincia, a la ministra de Educación, Elida Rasino, y al intendente Miguel Lifschitz; porque consideramos que sería útil poner la cocina en marcha para que funcione como un único comedor y reemplace los de las escuelas. Entendemos que es posible porque hay muchos problemas en el marco de la situación económica, que hacen a la vida cotidiana, y creemos que esto podría solucionar muchas de cosas. Está todo adecuado como para darle de comer a todos quienes asisten a los comedores escolares de Rosario".

La cocina centralizada funcionó durante buena parte de la década del `90, en el espacio emplazado en Felipe Moré 929, donde actualmente la Federación de Cooperadoras poseé sus oficinas y utiliza un pequeño espacio para actividades internas. Sin embargo, el lugar físico donde se cocinaban más de 60 mil raciones diarias, está en desuso, con la maquinaria disponible. "El lugar está a disposición de quien desee ponerlo en marcha con responsabilidad, porque nosotros nos tenemos posibilidades de hacerlo, pero sí creemos que el Estado tiene el poder para realizarlo", dijo Mogues a este diario.

Para la Federación, el objetivo fundamental de que se reabra la cocina centralizada es "sacar los comedores de las escuelas" y nuclear a todos en ese espacio; así "se podría liberar un poco a los directores de escuelas que atienden los comedores escolares, cuando deberían abocarse a los temas pedagógicos". "Es útil porque el lugar está adecuado para funcionar como cocina, tiene todos los elementos y con una muy baja inversión para el gobierno puede ponerse en marcha; sabemos que necesita acondicionamiento, pero lo principal e indispensable está disponible", señaló.

Mogues recordó que en el lugar "se servían 30 mil copas de leche, a diario. Hay cuatro hornos rotativos de importante tamaño en los que se hacía el pan, una cámara frigorífica para las carnes, y hasta se preparaban fiambres y embutidos".