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Se extendió la conciliación obligatoria entre los trabajadores de la Central Térmica Sorrento y la patronal, debido a que en la audiencia de ayer en el Ministerio de Trabajo no hubo acuerdo respecto al tema salarial; aunque el secretario general del sindicato de Luz y Fuerza, Alfredo Romero, indicó que "la propuesta se acerca bastante" a lo que están pidiendo. "Para nosotros es una buena noticia, porque continúan las negociaciones por el bien de los trabajadores", dijo a Rosario/12 la viceministra de Trabajo, Alicia Ciciliani. El martes que viene se intentará destrabar el conflicto.

A alrededor de 50 operarios de la usina se les adeudan dos meses y medio de sueldos. Por otro lado, los empleados sostienen la denuncia de "vaciamiento y falta de inversión" en la empresa por parte del accionista mayoritario, Sergio Taselli, por lo que están solicitando al Ministerio de Trabajo de Nación que interceda, debido a que temen perder su fuente de trabajo, aunque hasta el momento, "no hubo novedades", dijo Romero a este diario.

En cuanto a lo salarial, el lunes pasado vencía el plazo para destrabar el conflicto que mantiene prácticamente paralizada a la central, pero "por un pedido de la empresa" la audiencia se realizó ayer. Sin embargo, la propuesta que llevaron al encuentro los representantes legales de la patronal no fue del todo satisfactoria para los trabajadores. "Lamentablemente, no cerraron ni definieron nada, sin embargo, de común acuerdo, solicitaron extender la conciliación y pidieron pasar a una audiencia para la semana que viene, para ajustar los últimos detalles de la negociación. Así pasamos a una instancia de conciliación voluntaria", indicó Ciciliani tras la reunión.

El conflicto laboral que mantiene en vilo a los operarios de la Central Térmica Sorrento, nucleados en el sindicato de Luz y Fuerza, se inició en julio de este año, cuando los trabajadores iniciaron un reclamo de aumento salarial a través de la paritaria pero ésta fracasó. No obstante eso, percibieron que corrían peligro sus puestos de trabajo "por la falta de inversión a la planta, que produce el 30 por ciento de la energía de Rosario, pero no tiene mantenimiento", explicó Romero.

Pese a la necesidad de cobrar sus haberes, lo que preocupa sobremanera a los operarios tiene que ver con el futuro de la central. Por eso, sostienen y reafirman la denuncia contra el accionista mayoritario de la empresa realizada hace más de cuatro meses: "Lo único que le interesa a Taselli es el predio de la planta, porque debe tener un valor importante debido a la ubicación, pero no invirtió un peso en 17 años", acusaron.

La semana pasada, el sindicato realizó un paro de actividades en solidaridad con los empleados de la usina, que tuvo gran acatamiento. En esa oportunidad solicitaron la estatización de la central. "Encaramos gestiones para que el gobierno nacional solicite que Energía Argentina S.A (Enarsa) se haga cargo de la central, ya que este empresario no tiene interés en solucionar los problemas", recordó el gremialista.