rosario

Domingo, 19 de febrero de 2006

CIUDAD

Terenzio deberá responder por escrito lo que sabe de Celulosa

El diputado Lamberto insiste con que el secretario de Medio Ambiente
"en vez de dar respuestas genéricas", sobre la planta de Celulosa Argentina en Capitán Bermúdez, debe presentar a la Legislatura "informes técnicos" sobre el impacto ambiental.

 Por Paula Kearney

El polémico conflicto por las papeleras de Fray Bentos destapó la inquietud respecto al efecto nocivo de las mismas en todas las zonas urbanas cercanas a plantas de celulosa. Capitán Bermúdez no está ajena al conflicto. Fue en este sentido que, a partir de algunas declaraciones del secretario de Medio Ambiente de la Provincia, Marcelo Terenzio, el diputado socialista Raúl Lambertó presentó dos Pedidos de Informes en las últimas semanas, y está cerrando un tercero a los efectos de que se informe detalladamente si existen controles, y de qué tipo, en cuanto al impacto ambiental de la planta de Celulosa Argentina S.A. que se encuentra en esa localidad.

"El secretario (de Medio Ambiente) primero reconoce que la empresa Celulosa Argentina utiliza cloro elemental, en segundo lugar plantea que hay un proceso de reconversión que se le ha presentado a la Secretaría de Medio Ambiente y manifiesta que no ha sido ni aprobado ni rechazado, en tercer lugar hace conocer públicamente que no hay controles en Argentina de las dioxinas, furanos, y sales de cloro, y que solamente se las controla a partir de su impacto en la salud o en el medioambiente", afirmó Lamberto.

Destacó que Terenzio había asegurado que "en el caso concreto de la fabricación de pasta de celulosa por la empresa Celulosa Argentina, los valores no generan gravedad en el impacto ambiental".

Sin embargo, el legislador no se conformó con esa afirmación y decidió presentar dos Proyectos de Comunicación solicitando datos más específicos: Cuál es la tecnología utilizada, si se utiliza cloro elemental y cuáles son sus efectos sobre el medioambiente, si el órgano público de control y la Secretaría de Medio Ambiente conocen realmente cuál es la tecnología que se utiliza, si se han realizado estudios sobre los medios y las tecnologías aplicadas, si el órgano público de control efectúa los controles permanentes para evitar la contaminación, y si la Secretaría de Medio ambiente ha realizado alguna evaluación sobre el funcionamiento de la planta de Celulosa Argentina S.A., entre otras cosas.

Este detalle solicitado se debe a que según el legislador estas "son respuestas genéricas, casi como un comentario periodístico, pero una aseveración de estas características realizada por un funcionario público debería estar acompañada de los informes técnicos correspondientes y los valores traducidos en porcentajes, para determinar por qué se hacen estas aseveraciones".

En este sentido, enfatizó que "esto no es un informe hecho por un comentarista, sino por un funcionario público que está diciendo que han disminuido un x porcentaje, los porcentajes. Bueno, si han disminuido, cuáles eran antes los porcentajes anteriores y cuáles son los porcentajes actuales".

Por otra parte, continuó Lamberto, "dice que se pasa a un proceso de reconversión de cloro elemental a dióxido de cloro". "Yo quiero saber desde cuándo se empezó este proceso de reconversión, si esto es paulatino, o es simplemente un cambio que se va a hacer oportunamente, si se puede hacer de forma paulatina, qué significa la utilización - en porcentajes - de un método u otro, en cuánto disminuye, en cuánto se reduce el impacto ambiental, estas son todas las cosas que nosotros estamos preguntando". dijo.

Además afirmó que, según tiene entendido, "a partir de la década del '90 esta empresa empezó a ofrecer otro tipo de obras tratando de mejorar la calidad técnica de su producción", a pesar de ser una empresa que data de 1929, y que "tuvo en su producción -casi como todas las papeleras- una metodología muy antigua, muy preocupante en cuanto al afectar al medio ambiente. Por eso uno de los elementos más cuestionados por los ambientalistas es el uso del cloro elemental".

Con respecto a las denuncias o quejas de los vecinos, aseguró que "denuncias han existido", y detalló: "Ha existido una denuncia, incluso pública, hecha por Greenpeace el año pasado un día que en Capitán Bermúdez hubo que levantar las clases y hubo denuncias por ese aspecto".

En relación a este caso, afirmó que "hay estudios realizados en cuanto a que la cuestión producida por las calderas no era la adecuada y que hacían falta grandes inversiones para modificar su funcionamiento, y tenemos informaciones de que no existen espejos de agua o lagunas para decantar los líquidos y separar la parte sólida al efecto de que los efluentes que se abocan al río Paraná sean menos nocivos. No sabemos exactamente si existen filtros a los efectos de controlar las emanaciones de los gases al medioambiente".

Y enfatizó: "Todo esto es lo que debería estar estudiado, controlado, y exigir un seguimiento especialmente con una recurrencia no mayor a un mes, porque estamos frente a una celulosa que es una empresa que de por sí tiene su característica de contaminante".

Volviendo al motivo de los Pedidos de Informes, aclaró que si bien "no somos nosotros el órgano de control, sí son declaraciones que nos parecen genéricas, sin precisiones, y eventualmente si existen trabajos, si existen presentaciones, si existen valoraciones, si existen estudios realizados por la Secretaria de Medio Ambiente, deben estar por escrito, elaborados y firmados por las autoridades correspondientes, por los técnicos correspondientes, y es lo que los diputados queremos conocer".

Apoyándose en la recientemente reglamentada Ley de Medioambiente "que establece la necesidad de tener estudios de impactos ambientales", aseveró que "los estudios tienen que ser objetivos, realizados en un ámbito independiente -si es posible por entes públicos- y eventualmente ser determinantes sobre las políticas a seguir. Si al estudio lo hace la propia empresa en general se termina siendo juez y parte, y esto no es evidentemente lo aconsejable. Y cuando lo hacen consultoras pagadas por la propia empresa tampoco es aconsejable".

Al respecto resaltó que "el estudio del impacto ambiental, y el seguimiento del impacto del medioambiente es fundamental para ir determinando las medidas preventivas a realizar. Creo que esta Ley está vigente, esta reglamentación está vigente, y cuando alguien necesita dar informes sobre este tipo de empresas hace falta darlos con precisión".

Compartir: 

Twitter

La tecnología que utiliza Celulosa Argentina está en el centro del debate. Se desconoce si Medio Ambiente realizó alguna evaluación sobre el funcionamiento de la planta.
 
ROSARIO12
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.