El municipio ya tiene listo el proyecto para regular urbanísticamente el segundo anillo de la ciudad, detrás de los bulevares y avenidas céntricas. La intención del Ejecutivo es clarificar los usos en cada uno de las calles, explicitando donde no se puede construir en altura para así desalentar la especulación inmobiliaria. "Actualmente se parte de la premisa que en todos los terrenos de la zona se pueden construir edificios y eso incrementó el valor del suelo. Si se aclara la cuestión, al menos el precio del suelo debiera bajar y después dependerá del mercado en cuánto se traslada esa baja a las propiedades", explicó la secretaria de Planeamiento Mirta Levin. La funcionaria aclaró a este diario que la municipalidad no remitirá la propuesta de inmediato al Concejo "ya que hay muchos proyectos pendientes de aprobación vinculados a la planificación urbana que ya hemos enviado y no tiene sentido sumar expedientes hasta tanto los concejales se expidan". Entre las normativas que aguardan su sanción se encuentra el Plan Urbano 2007/2017, mensaje que desde 2008 se analiza en el Palacio Vasallo.

A dos años y medio de haber entrado en vigencia el nuevo Código Urbano que fijó inicialmente nuevos parámetros para el área central y el primer anillo, el Ejecutivo concluyó la elaboración del proyecto de ordenanza para regular el denominado segundo anillo de la ciudad. La zona se extiende al sur del bulevar 27 de Febrero, al oeste de la avenida Francia y al norte de la usina Sorrento.

"El espíritu de la propuesta para el segundo anillo es similar al del primer anillo, apunta a darle a la zona su propia especificidad, a diferencia de lo que marcaba la regulación anterior que tomaba a toda la ciudad de manera uniforme sin diferenciar la lógica de cada área. Se busca preservar a cada corredor con su propia impronta, reconociendo su historia y sus potencialidades", precisó Levin.

Durante meses, el equipo de Planeamiento realizó "un relevamiento estadístico muy exhaustivo de todo el anillo, analizando sector por sector cuáles eran los indicadores vigentes", para proponer la regulación específica al segundo anillo "que en términos de superficie es más grande que el primero no así en densidad poblacional".

Terminado ese análisis el gobierno municipal elaboró la propuesta con la intención de "clarificar los usos del suelo y de alguna forma desalentar la especulación inmobiliaria", planteó Levin. "Lo que se intenta plantear es que en determinadas zonas no es factible construir en altura, cuando hasta ahora se lo admitía implícitamente. Con esto debiera bajar el valor del suelo, después dependerá de la lógica del mercado de qué manera se traslada al precio final de las propiedades", agregó la funcionaria.

De todos modos, la secretaria de Planeamiento aclaró que el Ejecutivo no enviará de inmediato el mensaje al Concejo. "Los concejales tienen en estudio pendiente de aprobación varias iniciativas urbanísticas, entre ellas el Plan Urbano 2007/2017, con lo cual creemos que no tiene sentido remitirlo si antes tienen varios expedientes por sancionar", se explayó Levin en un claro mensaje a los ediles para que aceleren el tratamiento de la agenda urbanística en el cuerpo.