El asesinato a sangre fría de Maximiliano Rodríguez, hijo de Sergio "el Quemado" Rodríguez -principal acusado por el triple crimen de villa Moreno-, derivó ayer en una serie de medidas para dar con los autores. Además, se realizó un allanamiento en el departamento de la novia de la víctima, Sofía Laffatigue, quien está detenida por "entorpecimiento de la investigación". El operativo se realizó a pocos metros de la esquina de Corrientes y avenida Pellegrini, donde anteayer Maximiliano fue alcanzado por la muerte, tras haber sido "advertido" a fines de enero. Los resultados dieron cuenta de que parte de la investigación rozó la posibilidad de llegar a la justicia federal; lo que hace pensar que se habría hallado algún elemento relacionado con estupefacientes y cuestiones ligadas al narcotráfico. En tanto, apenas se entregara el cuerpo del "Quemadito" a la familia, serían velados sus restos. Sin embargo, en principio allí no estaría su padre, quien permanece detenido en Coronda, pese a la solicitud que hizo su defensa a la Justicia, y que fue denegada.

Tras desarrollar ayer las primeras medidas, que derivaron en reuniones entre el juez de Instrucción 9º, Javier Beltramone, la fiscal Nora Marull y personal policial, la Justicia espera resultados de las pericias, pero mientras tanto avanza en otras cuestiones que apuntan a cerrar el caso que terminó con la vida del Quemadito en el macrocentro rosarino.

Si bien el juez prefirió no adelantar datos sobre los pasos que dio la Justicia, fuentes cercanas al caso indicaron que se esperan los videos de las cámaras de seguridad del Banco Macro, y otros datos que apuntan a dar con dos o tres sujetos que circulaban en una moto blanca cuando Maximiliano caminaba con muletas (por el balazo en una pierna que sufrió días atrás) junto a su novia por la esquina de avenida Pellegrini y Corrientes, a pasos del departamento de la joven.

Según indica una de las versiones que investiga la Justicia, el tirador bajó de una moto, se acercó a la pareja por atrás y se paró en el medio de ambos colocando el arma calibre 9 milímetros a escasos centímetros de la cabeza del Quemadito, y sin mediar palabras gatilló. La explosión del disparo permaneció como un zumbido en los oídos de Sofía, que vio caer a Maximiliano hacia delante y la izquierda. Los autores se fugaron.

El juzgado decidió dejar detenida a la chica, quien fue testigo de los últimos ataques al muchacho de 26 años: el del 29 de diciembre de 2011, mientras circulaban en un BMW por la villa Moreno; y el del 29 de enero de 2013; cuando lo balearon en una pierna, en Arnold al 3200. Según se indicó, Sofía "está entorpeciendo la investigación", por lo que ayer permanecía arrestada en la Unidad 4º, donde --según indicó su madre-- habría sufrido un enfrentamiento con otra interna, que aparentemente es pareja de un hombre que "tuvo problemas" con el Quemadito. La chica será indagada por la Justicia en las próximas horas y la imputación que le cabría es la de presunto "encubrimiento".

La causa por la que estaba procesado el Quemadito, aquel primer hecho que fue preludio del triple crimen de villa Moreno, no es la única en la que Maximiliano estaba implicado. Había salido de Piñero el 29 de diciembre pasado, después de casi un año de detención por atacar a balazos a Facundo Osuna (finalmente, asesinado el 19 de junio de 2012). La carátula de la causa era "tentativa de homicidio"; pero tras la apelación de la defensa, el diciembre la calificación pasó a "lesiones" y a los pocos días recuperó la libertad.

El 8 de enero de 2012, Rosario/12 publicó que gente del barrio donde fueron asesinados Jeremías Trasante, Claudio Suárez y Adrián Rodríguez, hablaron de Sergio Rodríguez y su hijo. "Maxi también probó pisar fuerte en la barra de Ñuls", reza la publicación. En 2009, el hijo del Quemado se acercó a Diego "el Panadero" Ochoa, se mezcló en la barra, volvió a la cancha, y a los pocos días cayó preso por robo. También se lo investigaba por el asesinato de Juan Domingo "Pantera" Cano, el 15 de enero de 2009, en barrio Alvear. Pero ningún testigo quiso declarar contra Maxi. Después de un año de recuperó la libertad. Volvió a la cancha y participó del golpe frustrado contra el jefe de la barrabrava, "Panadero" Ochoa. Este salió de la cancha golpeado y retirado por la policía, como mostraron las imágenes del estadio. Las cámaras del Coloso también captaron el ingreso a la popular del Quemado cuando Ochoa bajaba las escaleras a los tumbos.