La cuenta bancaria Fuerza Rosario, que recibe donaciones para los damnificados de la catástrofe de calle Salta superó los 2,2 millones de pesos de recaudación, según informó la entidad que la administra. Ese fondo seguirá abierto, al menos hasta que concluya la gira benéfica que Fito Páez está realizando con ese destino. Mientras tanto, esta semana se constituirá una mesa intersectorial en la que se discutirán los criterios para repartir el dinero obtenido.

La cuenta 8777/3 del Banco Municipal había atesorado hasta el viernes $2.217.934,94, y los responsables de la Fundación Ciudad de Rosario, institución que la administra, estimaron la posibilidad de que esa cifra llegue a duplicarse en las semanas venideras, sobre todo cuando concluya el ciclo de recitales denominado "Abrazo a Rosario", que Fito Páez organizó junto a la ONG Red Solidaria por distintas ciudades del país.

"La cuenta recibe en forma permanente depósitos chicos pero que suman, aportes de gente particular que lo hace de manera espontánea, y aportes de empresas, además de la recaudación de los distintos eventos que se han realizado hasta el momento", indicó el empresario Mario Valero, presidente de Fundación Ciudad de Rosario, en diálogo con Rosario/12. Dentro del dinero recaudado se cuentan las utilidades que dejaron el maratón solidario y el partido de hóckey convocado por Luciana Aymar y jugadoras de Las Leonas. Los recursos acumulados se publican a diario en la página de Internet de la entidad depositaria, www.modelorosario.org.ar. A comienzos de esta semana, había colectado $1,7 millón, por lo que en este lapso sumó más de 400.000 pesos.

La cifra no es desdeñable si se trata de dinero y de la solidaridad colectiva que la generó, pero los organizadores de la cruzada saben de antemano que la ayuda será moderada, a juzgar por la cantidad de damnificados, alrededor de 240.

Un dilema a resolver es el criterio de reparto, dada la heterogeneidad de situaciones en el universo de damnificados y la diversidad de perjuicios sufridos por cada uno. "Hay realidades distintas, hay gente que tiene seguro, otros que no. Es un tema muy sensible y habrá que analizarlo en un comité que por lo menos integrarán la Municipalidad, el Concejo Municipal y la Fundación Ciudad de Rosario como entidad depositaria de la cuenta", estimó Valero. "Mirando el número total, puede parecer mucho, pero al dividirlo quizás la conclusión sea diferente y frente a determinadas situaciones es insuficiente, por eso hay que estudiar muy bien este asunto. Nuestro principal interés, ante todo, es que haya transparencia", puntualizó.

Valero aclaró que "no será la Fundación la que decida por sí misma el destino de los fondos, pero sí garantizamos que lo que ese comité defina se ejecutará con transparencia para que la ciudadanía sepa que ese dinero es el que irá a los damnificados".

Mientras tanto, la mayoría de los residentes y comerciantes de Salta al 2100 efectivizaron los subsidios otorgados por el gobierno provincial, de 20 mil pesos para alquilar y 50 mil pesos para adquirir muebles, enseres hogareños y demás, en el caso de quienes habitaban la torre siniestrada. Para el resto de los vecinos, el importe de 50 mil pesos se dispuso en forma de crédito blando del Banco Municipal.

Al margen de esa ayuda inicial en lo más duro de la emergencia, en los últimos días se hicieron oír algunos afectados y familiares de víctimas que trasuntan cierta impaciencia por el desarrollo de todo el operativo de asistencia. Ese malestar se hizo visible en la marcha popular realizada al cumplirse un mes de la tragedia, donde los deudos de víctimas fatales abandonaron el silencio y expresaron su exigencia de justicia y reparación total por las pérdidas sufridas. Valero dijo estar al tanto de esa sensación, pero terció: "El Estado ha otorgado subsidios y se hizo un relevamiento para comprender la situación de los damnificados, pero hay que ser muy prolijos para ver a quién se le asignan los fondos. La idea es identificar casos en especial que merezcan una compensación diferencial, y a partir de ahí asignar estos recursos".

La cuenta bancaria se habilitó a pedido del Ejecutivo municipal, luego de recibir algunas inquietudes a la espera para realizar donaciones. "Había numerosas personas e instituciones que deseaban aportar dinero para los damnificados, y por una cuestión de transparencia, la Municipalidad nos pidió a la Fundación que abriera la cuenta. No sabíamos cuánto se recaudaría hasta que los aportes se fueron sumando", dijo el presidente de la entidad civil.