El concejal Jorge Boasso (UCR) se refirió ayer a la interna del socialismo rosarino, tras los declaraciones del presidente del cuerpo, Miguel Zamarini, y la posterior respuesta de la intendenta Mónica Fein, que repercuten al interior del Frente Progresista (ver nota central). "Mi posición fue siempre la de construir una verdadera coalición política, más que hablar de frentes. Las coaliciones políticas se construyen entre partidos igualitariamente, todos son escuchados. A partir de esta concepción teórica y práctica en muchos países, cuestioné a los que hablaban de un frente en Rosario, fue nuestra permanente gran crítica, cuando competimos dentro del frente y cuando lo hicimos desde afuera", señaló Boasso. El concejal radical consideró que "la actitud de Zamarini ha sido muy digna, me sorprende gratamente que una persona que es frentista pero no se considera parte. Y si es excluido un par del socialismo, imaginen lo que nos pasa a los que no somos integrantes del socialismo, en un momento donde el gobierno municipal hace agua por todos lados, y que en vez de dialogar, de buscar ayuda, hace todo lo contrario".

El edil radical analizó bajo su particular óptica la interna del socialismo rosarino, tras los dichos de Zamarini y la posterior respuesta de la intendenta Fein que conmueven los cimientos del Frente Progresista local. En declaraciones a LT8, Boasso indicó que cuando decidió competir por fuera del frente, "de alguna manera queríamos ver si llegábamos a un punto donde se institucionalizaba la coalición política y no terminaban siendo partidos satélites que obedecían al socialismo. Hoy quedó demostrado que hay uno que manda y los otros que obedecen". Para el concejal radical, "el que tiene una posición contraria es exiliado, el peor de los castigos de la antigüedad".

Boasso agregó que lo que está observando ahora en el PS es que "las diferencias se hicieron saber más allá de las cuatro paredes de la discusión partidaria porque evidentemente ya llegaron a un punto de insoportabilidad". Para el presidente del bloque Radical que integra junto a los concejales María Eugenia Schmuck y Sebastián Chale, "las coaliciones políticas en el país terminaron siendo uniones transitorias de empresas".

El concejal planteó que todo partido "construye bases y condiciones, principios, se establecen estatutos, hasta se determina cómo se van a discutir las políticas y una vez discutidas cómo se van a votar; cómo van a votar en el Parlamento los legisladores de los distintos partidos políticos, cómo deberíamos votar en el Concejo Municipal aquellos concejales que obtengamos una banca dentro del frente, pero cada uno perteneciendo a un partido político".

En ese sentido, Boasso precisó que en Rosario el Frente Progresista "termina obteniendo cuatro concejales y construyen tres bloques. Esto también se construye previamente y se incluye en el estatuto. Evidentemente, no tiene nada que ver con las coaliciones políticas. Se establece también la alternancia en el poder. Si hay partidos que construyen juntos una opción de gobierno, no puede terminar un partido después de 20 años construyendo todo en base de lo que dice este partido".

El edil radical dijo que cuando escucha a (Hermes) Binner, a (Mónica) Fein, a (Miguel) Lifschitz, "son ellos lo que dicen quiénes tienen que ser los sucesores; es decir, impera más la dedocracia que la democracia, eso no es una coalición política". Boasso señaló que estas cuestiones son las que tienen que discutirse en el radicalismo que, a su criterio, "no debe ser una dama de compañía en este mal llamado frente porque hay que discutir todo. Si Fein tiene que hacer una propuesta para aumentar impuestos, que convoque a todos los integrantes de los partidos para discutirlo previamente para ver si luego es viable".

Consultado sobre un posible retorno al Frente Progresista, una posibilidad que al menos sugirió el concejal Martín Rosúa (UCR), Boasso señaló que no se trata de "una cuestión de volver o no a algo que no existe. Nuestro grupo de militancia siempre tuvo espíritu frentista, pero un frente en serio, como una vez se lo propuse a Fein, una señora que siempre sonríe, no levanta la voz, pero hace lo que quiere y escucha muy poco".

Finalmente, el concejal radical dijo que la intendenta "en vez de buscar ayuda, de dialogar en serio, hace todo lo contrario y no lidera el cambio que Rosario necesita. No lideró los cortes de luz en defensa de la gente, se escondió cuando la ciudad estaba a oscuras. Se escondió con el tema de la seguridad. Rosario hoy es la ciudad más insegura de la Argentina, tenemos el doble de los asesinatos de Córdoba".