El defensor general de Santa Fe, Gabriel Ganón, salió al cruce de las declaraciones del secretario de Seguridad provincial, Gerardo Chaumont, quien aseguró que la policía provincial "no es de gatillo fácil ni torturadora", y aseguró que el "discurso negador" del funcionario no hace más que "contribuir a un modelo violador de los derechos humanos".

"Desde 2011 llevamos un registro de casos de tortura; la cantidad de casos que se han ido acumulando indica todo lo contrario de lo que afirma el secretario de Seguridad, que hace poco que asumió y acaso desconoce la situación", ironizó Ganón. "Lo que no puede desconocer es lo que ocurrió con Franco Casco hace unas pocas semanas atrás, un episodio en el que la policía está directamente involucrada en su desaparición forzosa", enfatizó el defensor general.

"Me parece que tiene una mirada negadora de la realidad -añadió-, y eso no contribuye a mejorar el comportamiento de la fuerza de Seguridad, todo lo contrario, contribuye a acentuar un modelo violador de los derechos humanos".

Asimismo, afirmó: "Hay muchos casos de gatillo fácil, nosotros los estamos registrando y tratando de ver el comportamiento judicial y de la agencia administrativa, que teóricamente controla a la policía pero que, en realidad, no termina controlando absolutamente nada".

Ganón señaló que "en lo que va del año ha habido once casos de gatillo fácil en Rosario y uno de estos casos es bastante paradigmático: el de Emanuel Cichero, que lo mató la policía".

Chaumont recordó los 26 casos de policías que pasaron a disponibilidad: "Esto obedece al hecho de que no es compatible que un funcionario que está investigado no pueda seguir ejerciendo sus funciones hasta que el proceso determine si es o no culpable, se lo aparta de sus funciones hasta que las causas judiciales estén resueltas".

Después ponderó los logros del mes que pasó. "A mi entender en este último mes la policía está dando sobradas muestras de su accionar, ha habido 1050 detenidos", dijo. Y agregó: "Si a esto se le suma el secuestro de 650 armas de fuego, muestra que la policía está trabajando".

En relación al caso de Franco Casco, el chico de Florencio Varela que desapareció en Rosario y luego su cuerpo apareció sin vida flotando en el río Paraná, el funcionario dijo: "Sobre este caso puntual no puedo decir nada porque la Justicia no se ha expedido, lo que digo es que la policía respeta los derechos humanos, eso no quiere decir que no pueda haber algún hecho aislado".

"Nadie puede decir hoy honestamente que la policía de Santa Fe sea una policía de gatillo fácil, o una policía torturadora, si uno lee la crónica policial no encuentra hechos de este tipo, y esto es muy valioso", manifestó Chaumont.