La Jueza de Menores Carolina Hernández ordenó mejoras en el Instituto de Rehabilitación del Adolescente de Rosario (Irar), tras un hábeas corpus presentado por el defensor general Gabriel Ganón a favor de los niños y adolescentes alojados allí. Para el funcionario, la situación es "grave" en cuanto a "sobrepoblación, infraestructura, albergue de menores en celdas de ingreso, alimentación, servicio de sanidad y suministro de agua potable" del cuestionado instituto. La jueza puso plazos de entre 24 y 72 horas para "que se realicen tareas de limpieza integral"; "se garantice la climatización general del sector" y que "se reponga el cerramiento en las ventanas que no lo tienen".

El recurso fue presentado el 29 de mayo, tras una inspección realizada por miembros de la Defensoría Provincial, luego de recibir denuncias sobre las condiciones en que se encontraban los jóvenes. Las anomalías detectadas se vinculan con deficiencias estructurales del instituto en consideración, que generan violencia y violaciones permanentes a los estándares constitucionales de Derechos Humanos.

Hernández ordenó también que "se garanticen salidas diarias al aire libre para los jóvenes, sin perjuicio de las actividades de educación formal en las que participan"; y que las mismas sean de "tiempo razonable para la vida de un adolescente". Al mismo tiempo, encomendó a la Subsecretaría de Asuntos Penales de la Provincia de Santa Fe que "imparta las órdenes conducentes a la adecuación de las condiciones de entrega de la comida en el horario nocturno", la continuidad del plan de desratización periódico que se lleva adelante de manera quincenal y una "mayor presencia de los acompañantes juveniles".