Visiblemente ofuscado, el intendente Miguel Lifschitz refutó ayer las cifras difundidas por el ministro de Hacienda provincial, a través de las cuales la Casa Gris informaba que había incrementado un 185 por ciento el porcentaje de coparticipación girado a municipios y comunas. "El ministro (Walter Agosto) hizo aseveraciones parciales y fragmentarias, lo que termina siendo una mentira", disparó el intendente quien luego calificó de "saqueo permanente a los municipios y comunas de Santa Fe", a la modalidad utilizada por la provincia para distribuir la masa coparticipable remitida desde la Nación. "Estamos muy calientes", reconoció Lifschitz para quien la "gota que rebalsó el vaso es que ahora pretenden hacernos pagar el financiamiento educativo. La ley señala que deben hacerlo la Nación y la provincia y ahora (los funcionarios provinciales) dicen que deben ser los municipios". El jefe comunal advirtió que de no prosperar los reclamos administrativos ya planteados para que la Gobernación santafesina aumente los fondos que envía a Rosario en concepto de impuestos federales recaudados, presentará una demanda en la Justicia.

En rueda de prensa, acompañado por todo su gabinete, el intendente explicó que había convocado a los medios para "esclarecer y reclamar por los recursos que reciben los municipios de los impuestos nacionales y los porcentajes que la provincia debe girar". En ese sentido calificó de "saqueo permanente a los municipios y comunas de Santa Fe" el modo en que la provincia transfiere esos recursos y al respecto mencionó un informe de la Fundación Apertura, publicado por Rosario/12, que "demuestra cómo se han ido quedando con buena parte de los mismos".

"La verdad -dijo Lifschitz a Radio Dos- es que por decirlo con un termino vulgar estamos calientes de que nos metan la mano en el bolsillo. Las declaraciones del ministro nos han sacado de las casillas".

Agosto había asegurado el lunes en Rosario, que la Casa Gris incrementó un 185 por ciento los fondos girados a municipios y comunas en concepto de coparticipación (ver aparte). "El ministro de Hacienda ha hecho aseveraciones y declaraciones que son parciales, que son absolutamente fragmentarias y que como toda verdad parcial termina siendo una mentira, porque falsea la realidad de los hechos. No analiza las tendencias, no analiza la evolución de las políticas tributarias y de distribución de los recursos de la provincia en los últimos 20 años", agregó.

En el Palacio de los Leones el jefe comunal detalló que a través de leyes (una de tiempos de la dictadura militar), y pactos durante los mandatos de Carlos Reutemann y del propio Jorge Obeid, el porcentaje de coparticipación pasó de un 18,78% en 1975 al 7,44% actual. Representan esas cifras 63 centavos por habitante en 1975 a 25 centavos en 2006. Según el municipio, solamente en 2005 Rosario dejó de percibir 150 millones.

Lifschitz mostró un cuadro comparativo entre algunas provincias de los coeficientes de coparticipación: Córdoba, similar a Rosario, percibe un 20 por ciento, Buenos Aires 16,14 por ciento, Salta 15 por ciento, Mendoza 14 por ciento y Santa Fe 13,44 por ciento (ver cuadro).

Según el intendente, la "gota que rebalsó el vaso" fue la mención que hizo el ministro Agosto a inminentes recortes que hará la provincia de la masa coparticipable que le corresponde a los municipios para financiar el incremento presupuestario progresivo (en proporción al PBI) contemplados en la Ley nacional de Financiamiento Educativo. En la municipalidad calculan que ello le costará a Rosario entre 3 y 4 millones de pesos para el año en curso, "y el año que viene puede ser más".

Lifschitz señaló que si bien tal recorte es grave para todos los municipios, "mucho más agresivo es para con Rosario, que presta servicios importantes como los de salud, que le demanda el 25 por ciento de su presupuesto; el mantenimiento de las escuelas con recursos propios a través del FAE; el pago de policía adicional en espectáculos y otros servicios para brindar seguridad a la población", además del programa de obras públicas sin recibir parte de los fondos del conurbano.

"Es por estos motivos que la provincia puede hoy tener superávit y los municipios deben afrontar el pago de servicios e incrementar los salarios de su personal", afirmó el intendente.

Para el intendente esta actitud "lesiona la gobernabilidad de los municipios. Corresponde al gobierno nacional y provincial hacerse cargo del financiamiento de la educación que hoy, de manera indirecta, están sustentando los municipios. Los responsables no pueden eludir su responsabilidad. Por ley sancionada a fines del año pasado que el bloque socialista objetó, la provincia debe aportar el 60 por ciento y la Nación el 40 por ciento de los fondos".

Por último, sostuvo el intendente: "Si no tenemos respuesta política a nuestro reclamo, acudiremos a la Justicia".