A casi un año del crimen de Jonatan Herrera, el joven que lavaba su auto en barrio Tablada cuando recibió un disparo policial, la fiscalía pidió prisión perpetua para el principal acusado, empleado de la Policía de Acción Táctica (PAT). El juez Gonzalo López Quintana evalúo que "hay peligrosidad procesal" sobre Ramiro R., ante la pena que pidió el fiscal Adrián Spelta; por lo que seguirá preso hasta que se realice la audiencia preliminar al juicio oral. En tanto, otros tres efectivos seguirán presos hasta el 15 de febrero, mientras la defensa y la fiscalía buscan acordar un juicio abreviado con la negativa de la familia del chico. "No vamos a aceptar ningún abreviado; la sociedad tiene que saber lo que le pasó a mi hijo, por eso queremos juicio oral y público", reclamó María Elena, la madre del joven que tiene "distintos intereses" con la mamá de su nieto (hijo de Jonatan), quien sí acepta abreviar. Además, la mujer pidió que si hay más personas implicadas, "que paguen también".

María Elena ya lo había dicho la semana pasada, cuando se movilizó contra el juicio abreviado que podría cerrarse con tres de los policías implicados, acusados de tentativa de homicidio al principio de la investigación; pero que ahora buscan acordar una pena por el delito de abuso de armas, con tres años de prisión. "Con un juicio abreviado este caso queda encerrado entre cuatro paredes", dijo la mujer.

La causa cuenta con dos querellantes: la madre y hermanos del joven de 23 años; y la madre de su hijo, que tiene poco más de un año. María Elena rechazó al acuerdo abreviado desde el principio, y ello derivó en que no pueda cerrarse el acuerdo. Ahora, probablemente la cuestión llegue al fiscal regional Jorge Baclini, para que decida sobre esa contraposición.

Sin embargo, ayer el fiscal Spelta pidió que el juez López Quintana resolviera la unificación de las querellas; pero el magistrado se negó a tratar el tema ya que en la sala no estaban todos los querellantes. Ante ello, le advirtió al fiscal que debería solicitar otra audiencia para tratar ese tema.

En tanto, ordenó la continuidad de las prisiones preventivas de los cuatro acusados: la de R. hasta la audiencia preliminar de juicio, que será el año que viene; y la de los otros tres imputados, hasta el 15 de febrero, cuando debería estar resuelta la posibilidad del abreviado planteado.

El 4 de enero pasado, Jonatan lavaba su auto cuando una persecución a cargo del personal del Comando Radioeléctrico irrumpió en la cuadra de Seguí y Ayacucho. Los efectivos intentaban atrapar al ladrón de una juguetería cercana. En ese momento, cuatro agentes de la PAT bajaron de un colectivo en el que circulaban y comenzaron a disparar, "cuando los agentes del Comando ya tenían al ladrón en el piso", según relató el fiscal Spelta, al hacer las imputaciones. Por aquellos días, se le endilgó la autoría del crimen a Ramiro R., de 25 años; mientras que Francisco R. Alejandro G. y Luis S. fueron acusados por tentativa.

Ahora, los abogados de estos tres buscan cerrar un juicio abreviado con la Fiscalía, pero para ello necesitan de la anuencia de la parte querellante, que a su vez está dividida. "Tenemos distintos intereses con la madre de mi nieto. Nosotros queremos justicia, porque es terrible cómo lo mataron a mi hijo", dijo María Elena.

Según detalló la mujer, al término de la audiencia de ayer, "los tres policías quedarían acusados como abuso de arma agravado", lo que resuelta "insuficiente" para la familia. "Queremos que todos lleguen a juicio oral y público y por eso vamos a seguir luchando y a no bajar los brazos. Queremos que sean condenados como corresponde. Se supone que el fiscal tiene que estar a favor de esclarecer lo que le pasó a Jonatan", agregó. Julieta, hermana de la víctima, agregó: "No vamos a estar de acuerdo con el abreviado, queremos a los verdaderos acusados, no perejiles. Acá la policía es responsable".