El secretario general del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor de Rosario (Smata) denunció que peligran 800 puestos de trabajo en la planta que General Motors posee en Alvear. Sin embargo, la automotriz aseguró, a través de un comunicado, que los puestos laborales están asegurados. En marzo, como consecuencia de la magra producción, la automotriz estadounidense dará de baja las líneas de los modelos Agile y Corsa Classic y casi mil personas están abocadas de manera exclusiva a las tareas de ambos vehículos. "Por la crisis, en Brasil hace tiempo que no están comprando nada y además están intentando colocar su producción en el país, afectando a la mano de obra local", explicó el gremialista.

La producción automotriz del país se derrumba, desde que comenzó el gobierno del presidente Mauricio Macri. En el mes de septiembre, las terminales locales fabricaron un total de 42.599 unidades, según los datos de la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa), una cifra que da cuenta de una baja del 19,6 por ciento en comparación con el mismo mes, pero del año pasado. El acumulado 2016 habla de un descenso del 14 por ciento con respecto al mismo periodo del 2015. Las ventas, por otro lado, crecieron, ya que las firmas aumentaron el mes pasado sus ventas un 6 por ciento. En el acumulado del año, las ventas mayoristas crecieron un 18,1 por ciento.

La baja sostenida en la producción más la decisión de GM, revelada por Smata, pone en alerta a los trabajadores de la planta ubicada a unos kilómetros de Rosario. "Estamos teniendo reuniones permanentes con los directivos de GM para ver qué va a pasar, y ellos quieren esperar a marzo a ver cómo está el panorama". El año próximo, la empresa solo tiene previsto para Alvear el lanzamiento de la nueva línea de producción del modelo Cruze II, por lo que el gremio se mantiene en alerta. "El gobierno parece que está en otro mundo, lo escuchás a Prat Gay y es todo una maravilla, pero no se donde viven, acá hay muchos despidos, estamos preocupados", se sinceró Barros en LT8.

La automotriz, en tanto, desmintió al gremialista. Dijo que la planta trabaja "sin contratiempos" y que la fuente laboral de los empleados no está en riesgo. En tanto, a través de un comunicado manifestó que "la producción de los modelos Classic y Agile se encuentra en su etapa final como ha sido previsto para dar paso a la producción del nuevo Cruze 5 puertas que se suma a la producción del Cruze sedán, manteniendo los puestos de trabajo como informamos desde un principio de la inversión". Smata se mantiene firme en su versión y lo sostiene en base a los encuentros periódicos que mantiene con los directivos de la firma.

"El tema es complicado, no es como lo ven por arriba, como el 'fiscal de Macri', Cristiano Ratazzi (titular de Fiat Argentina) que habla y tiene la fábrica en Córdoba parada", apuntó Barros, en Radio Sí. En tanto, el sindicalista consideró que "este cuadro de situación está afectando a la autopartistas locales, cuyas ventas se han contraído notablemente". Además, "se ha caído notablemente la venta y en talleres donde trabajan dos o tres muchachos están al borde de cerrar", indicó.

Smata forma parte de la Asociación Industrial Santafesina, que se creó esta semana y agrupa a 35 gremios de toda la provincia, entre los que se destaca la UOM, el Sindicato de la Carne, el Vidrio, los Plásticos, Alimentos, y más. Se proponen ser un "espacio fuerte" y trabajar "diariamente en los problemas que venimos padeciendo".