Lucas Oro, el joven de 21 años que el último sábado fuera baleado en su rostro con un disparo de una escopeta Itaka por un policía en Venado Tuerto; fue trasladado en la tarde de ayer al Hospital Provincial de Rosario, por orden del jefe de policía provincial Jorge Pallavidini. El joven había reaccionado bien ayer luego del estado de coma inducido por los médicos tras el brutal ataque que sufriera a manos de un novato agente policial que no legaba a un año de antigüedad en la fuerza.

Ayer en tanto la Liga Argentina por los Derechos del Hombre de Venado Tuerto repudió a través de Ana Braghieri, el ataque policial. "Este grave hecho representa una acabada manifestación de la deliberada política estatal de represión y control social sobre los sectores populares, la que se diseña, organiza y ejecuta desde las más encumbradas esferas de decisión política provincial. Por supuesto, en el caso concreto de la ciudad de Venado Tuerto, esta política cuenta con la activa adhesión del Intendente Municipal, Roberto Scott, quien públicamente ha reivindicado las recetas de 'mano dura', ha protagonizado provocaciones y bravuconadas de todo pelaje y hasta ha amenazado de muerte a los dirigentes y militantes de nuestra organización". De igual modo rechazó la "versión policial brindada a los familiares de Lucas Oro, la que se inscribe en el recurrente accionar policial de tergiversar los hechos, demonizar a la víctima y ensanchar el campo de la impunidad reinante en el 'país de los derechos humanos'.