Lejos de atenuarse, ayer continuó la polémica en torno al destino del nuevo hospital provincial de Rosario. La vicegobernadora María Eugenia Bielsa salió al cruce de las declaraciones de Hermes Binner quien adelantó que de llegar a la Casa Gris no avalará su emplazamiento en el Batallón 121 del Ejército: "Es una discusión de esquina, chiquita, de mala entraña. Si la provincia tiene el dinero para hacer el hospital cuál sería el problema. El doctor Binner instala una discusión de mala fe," afirmó.

Tras la información revelada el lunes en exclusiva por Rosario/12, donde se adelantó que en dos semanas la provincia lanza el concurso de ideas para determinar el perfil del nuevo centro de salud que se pretende construir en la zona sur de la ciudad; distintos referentes del socialismo reiteraron su oposición a la iniciativa por la cercanía -escasas cuatro cuadras- con el hospital municipal Roque Sáenz Peña.

Según Bielsa el objetivo no es hacer otro hospital provincial sino trasladar el centro de salud ubicado en Alem y 9 de Julio al inmueble que antes ocupaba el Batallón 121. "Hay 300 mil personas de zona sur que se atienden en el hospital Provincial y podrían atenderse en mejores condiciones. Son rosarinos que también tienen derecho a tener un hospital moderno", argumentó la funcionaria santafesina.

"Yo creo que es necesario, y no se cuál es el argumento. Si se trata de la cercanía con el hospital Roque Sáenz Peña no me parece porque cuando se construyó el Heca, que desde lo urbanístico esta pésimamente ubicado, a siete cuadras del hospital Centenario, no dijimos nada", agregó.

Para el diputado nacional y candidato a intendente kirchnerista, Juan Héctor Sylvestre Begnis "la municipalidad debe ser coherente con lo que pide. Hace pocas semanas el intendente reclamaba tres hospitales que antes había rechazado ahora dice que no es necesario un hospital en zona sur porque es una zona que está cubierta. No es claro el sistema que propone". "En la década del 30 -continuó- la familia De Alzaga donó un terreno para construcción de un hospital, siendo previsor del crecimiento de la ciudad y de esta zona en particular. Lejos de esta visión premonitoria la municipalidad ha desmantelado el viejo policlínico San Martín de Barrio Belgrano y llevo todo el equipamiento de laboratorio y equipo de rayos a San Luis y Moreno. En lugar de acercar la atención a la gente, la alejamos. Una muestra de esta gestión, sacamos cosas de los barrios y las llevamos para el centro. Hay que definir un plan de salud, aquí las contradicciones afectan la calidad de vida de la gente".