"Estamos aplicando un plan de ajuste racional, responsable, buscando el menor impacto posible en la prestación de servicios para tener en orden las cuentas", sostuvo ayer el intendente, saliendo al cruce de las críticas de los denominados músicos autoconvocados quienes denunciaron la suspensión de 65 conciertos que estaban previstos hasta fin de año. "No se trata de perjudicar a nadie, a ningún sector en particular sino de hacer un esfuerzo teniendo en cuenta la realidad financiera del municipio por el aumento de costos", agregó Lifschitz.

Por su parte, el secretario de Cultura Fernando Farina, negó que fueran a suspenderse los conciertos tal cual denunciaron los músicos, quienes decidieron realizar hoy una protesta pública en Córdoba y Corrientes.

"No estamos pensando en absoluto suspender esa actividad, lo desmiento en absoluto. A lo sumo deberemos buscar formas diferentes de financiación, pero no estamos pensando en suspender ningún ciclo. Lo que estamos viendo es la reprogramación puntual de algún espectáculo. También deberemos analizar la realización de cambios en la modalidad de espectáculos gratuitos o no", enfatizó el funcionario en declaraciones radiales. "En lo que hace a Cultura estamos trabajando sobre todos nuestros festivales, sobre todos nuestros ciclos. Vamos a buscar la mejor manera de realizarlos, pero no dejarlos de lado", abundó con respecto a la probable suspensión de otras actividades culturales.