En la Asociación del Fútbol Argentino no saben cómo tomar distancia de lo hecho por Eduardo López con Ñuls. La casa rectora del fútbol nacional que preside Julio Grondona no muestra ante los rojinegros la misma reacción que ostentara en 2007 para salir al rescate de Central. Y ayer el presidente Guillermo Lorente se volvió de Buenos Aires con algunas promesas de la AFA, pero pocas certezas.

En la oportunidad las autoridades nacionales le hicieron saber a los directivos de Ñuls los incumplimientos contractuales que la entidad rojinegra mantiene con Chacarita e Independiente, por los pases de Pablo Aguilar y Juan Manual Insaurralde, y Gastón Machín, respectivamente. De eso se ocuparon Lorente y Gustavo Dezotti, quienes antes de llegarse a la AFA se reunieron con autoridades del funebrero y el rojo para comenzar resolver ambas deudas.

Entre tanto, los jugadores en cuestión deberán presentarse esta tarde en Bella Vista, donde a la 17 dará inicio el proceso de Roberto Sensini como director técnico, de un plantel que será reducido a no más de 35 profesionales y en el cual hay guardado un lugar para Cristian Fabbiani, quien el domingo anticipó por medio de su representante que se hará presente a la cita.