Para el intendente Miguel Lifschitz, "la violencia y la inseguridad son problemas complejos que deben abordarse de manera integral con políticas públicas muy claras, muy definidas y sostenidas en el tiempo. Esto es lo que está faltando. No hay una solución de un día para el otro. Ahora, seguramente se va a recurrir a la presencia adicional de policía en las calles pero todos sabemos que esos policías se sacan de otras funciones. En 15 o 20 días volverán a su función habitual y volveremos al punto inicial". Según Lifschitz, "hay que trabajar sobre el tema carcelario, sobre la problemática juvenil y sobre la base del problema: el tráfico y consumo de drogas. Hay que pensar en medidas de mediano y largo plazo si queremos encontrar soluciones en serio a este tema".

El jefe comunal reconoció, en diálogo con Radio Dos, que el municipio aún no ha puesto en práctica la ordenanza que exige adoptar algún mecanismo de seguridad interno en las unidades. "Hemos tenido innumerables reuniones con los sectores involucrados y no hay consenso respecto de cuál es el mejor mecanismo, todos tienen distintas ventajas y muchas desventajas. La ordenanza ofrecía laternativa, yo sinceramente creo que el problema de la seguridad es más amplio, va a haber seguridad para los taxistas si la hay para los choferes de colectivos, para los repartidores, para el ciudadano común", aseguró Lifschitz.