Para el ex secretario general de Amsafé Rosario, Gustavo Teres, lo que está en debate en los comicios del próximo jueves son "dos modelos sindicales: O preservamos los principios fundacionales de la CTA o nos convertimos en correa de transmisión del Estado y del gobierno". Sumando diferencias con el otro sector interno, el dirigente de los docentes santafesinos cree que "hay momentos históricos en los que se puede o no ser testimonial, pero esa no es la discusión en estas elecciones". Asegura que a la lista que integra "no le interesa si los trabajadores son peronistas o kirchneristas, pero sí nos interesa un sindicalismo independiente y con mecanismos de resolución asamblearios". También se expresa sobre la democracia sindical y el crecimiento de la CTA.

-¿Qué es lo que para ustedes está en debate en estas elecciones de la CTA?

-Nosotros somos portadores de una experiencia que empezó en Rosario y se amplió a la provincia de Santa Fe, que es la lista 7. Es una confluencia de listas que nacionalmente habíamos estado enfrentadas. Acá se da una experiencia de unidad desde la base. No nos costó esta unidad porque lo hicimos a partir de la unidad en la lucha. No es un acuerdo de superestructuras sino que tiene que ver con una práctica asamblearia y de ejercicio de la solidaridad. Para nosotros se juegan dos modelos sindicales: O preservamos los principios fundacionales de la CTA que tienen que ver con la autonomía y la independencia de clase que no significan prescindencia, pero que tampoco significan ser correa de transmisión de ningún partido político, de ningún patrón y tampoco de ningún gobierno.

Teres asegura que para su sector "no es un problema que haya trabajadores peronistas o trabajadores kirchneristas. Lo que sí hay que tener en cuenta es que las experiencias históricas han demostrado que el sindicalismo -a derecha y a izquierda ha fracaso cuando se convirtió en correa de transmisión o en apéndice del Estado. Por eso son fundamentales la reafirmación de una autonomía y el ejercicio de un sindicalismo asentado en la discusión asamblearia". Y agregó que "para nosotros no hay conflictos malos y buenos como a veces en la otra lista se han planteado. Para nosotros hay conflictos justos, no preguntamos quién dirige este conflicto, sino que nos ponemos a disposición y vamos a preguntar qué se necesita".

Cuando se dice desde el otro sector "no queremos un sindicalismo testimonial sino una central sindical con otro crecimiento", ¿qué responden ustedes?

Bueno, esa es la lógica de gobierno de Chacho Alvarez cuando terminó en la Alianza y acusaban a otros de ser testimoniales. Hay momentos históricos en los que se puede o no ser testimonial, pero esa no es la discusión. La CTA debe tener una plataforma unitaria que de cuenta de los conflictos y de las necesidades del mundo del trabajo. En todo caso son testimoniales aquellos que plantean el pago de la deuda externa, son testimoniales aquellos que no quieren discutir el 82% móvil para los jubilados que fue una consigna implantada en la conciencia de nuestro pueblos por las marchas de los jubilados de la CTA.

-Los ejemplos que da son de temas que la oposición al gobierno está llevando al parlamento...

-Nosotros creemos que estamos frente a un gobierno que tiene una lógica discursiva nacional y popular, pero que después acepta la lógica de la globalización neoliberal y no hay un cambio productivo que se oriente realmente hacia lo nacional y popular. Vemos que hay un proceso donde se dejan atrás los parámetros de la desocupación, pero se instalan niveles de empleo precarios, donde la desigualdad se ha profundizado. La lucha sobre la distribución del ingreso sigue siendo parte de una lucha estratégica para los trabajadores. Porque aquí no se ha salido del modelo productivo hegemónico, no se ha salido del modelo productivo sojero, no hemos tenido un camino de salida de las políticas financieras.

-¿Cree usted que la CTA es una central obrera en crecimiento?

-Se abre una perspectiva interesante para los próximos 10 años de la Central. Hay que seguir profundizando el reclamo de democracia y libertad sindical que son dos caras de una misma moneda. No existe libertad sindical si no existe democracia sindical, a pesar de que hay sectores que lo plantean en términos unívocos de libertad sindical porque niegan la democracia sindical. El gran desafío es ir a la búsqueda de los millones de trabajadores que no tienen ningún tipo de organización. Si hoy hay un sector mayoritario es el de los que no están encuadrados, aquellos que están por afuera de los convenios colectivos de trabajo. Ahí hay un desafío y una oportunidad para que la CTA supere su tradición de sector sindical de empleados públicos y empezar a representar a cada vez más amplias porciones de empleados privados. Por eso es para nosotros tan importante el rol de la UOM de Villa Constitución, lo que pudimos construir con el Sindicato de Aceiteros, con el Sindicato de Prensa de Rosario y el gremio de los trabajadores lecheros, entre otros, marcan un camino correcto para avanzar hacia una Central más mixturada, más plural y diversa desde el punto de vista organizacional y sumando a más movimientos sociales.

Teres incorporó otro tema a la discusión interna de la central obrera al mencionar que "la proporcionalidad en las listas es un tema pendiente y nosotros no lo planteamos desde el oportunismo, porque ahora el otro sector habla del tema pero fue su principal candidato el que eliminó la proporcionalidad en la conducción de CTERA en su momento que sí la tenía", concluyó.