La denuncia de la ingeniera Química P. incluye otras irregularidades. La joven asegura que el director del Instituto de Estudios Nucleares y Radiaciones Ionizantes (IENRI), Oscar Peire le pidió que le transfiera una parte de su salario. "Mi remuneración como contraparte por los servicios que prestaría, de acuerdo con lo pactado inicialmente (en la primera reunión del mes de junio) con Peire y Moreira se componía de una beca extraordinaria de trabajo otorgada por la Comisión Nacional de Energía Atómica, siendo el director de beca el Hugo Scolari, responsable Primario de una de las instalaciones de CNEA. De acuerdo a lo mencionado por Peire, dicha beca se efectivizaría en febrero con cobro retroactivo al mes de diciembre y un cargo docente de Profesor Adjunto con dedicación exclusiva en la Facultad para hacerme cargo de las tareas de docencia en las asignaturas electivas Centrales Nucleares 1 y 2, de Ingeniería Eléctrica. Dicho cargo se efectivizaría a partir de mi incorporación en diciembre", detalla la joven, quien continúa: "Finalmente, el 18 de diciembre, que se constituye como el primer formal día de trabajo, el ingeniero Peire me solicita la donación del 60 por ciento de la beca de CNEA, una vez que se haga efectiva. Su argumento se centraba en 'evitar desigualdades salariales con mis compañeros de trabajo'. Es decir, debía cobrar la beca entera y entregar mensualmente el 60 por ciento de la misma en efectivo o mediante una transferencia".