Con el compromiso de seguir reuniéndose y ampliar la convocatoria a otros integrantes del movimiento teatral, la movida tomó ciertos puntos importantes para reflexionar en el futuro. "Es hora de hablar de nuestros problemas -dijo Ramiro Lollo-, de alguna manera todos hemos permitido lo que está pasando; cómo puede ser que en Rosario no exista una agrupación que reúna al conjunto de los actores".

El actor y director Julio Minucci, quien conectó su pasado político con los vaivenes por los que atraviesa hoy el Instituto Nacional del Teatro, recordó que "cuando se habla de la política del INT, yo quiero recordar que muchos de los que ahora están ocupando algunos puestos allí han sido compañeros de militancia política en el peronismo y precisamente al ver hoy en que se transformó esa militancia, me he alejado y me mantuve al margen de trabajar en relación con el INT".

Con una concepción democrática y trascendiendo su rol de teatrero, Minucci invitó a los presentes "a resolver aquí como ciudadanos, no ya solo como gente de teatro, si vamos a seguir permitiendo que nuestros representantes sean elegidos por otros; creo que con acciones como éstas se puede torcer la acción de cierta gente del INT, así nos vamos a sentir no traicionados en nuestra buena fe".