La mujer está actualmente internada en una clínica de Udine (noreste del país) justamente para que se le aplique un "protocolo de muerte", en aplicación de un fallo del Tribunal de Apelaciones de Milán.

"Sí, estamos trabajando para intervenir", dijo anoche Berlusconi a la prensa, según reportó la agencia italiana Ansa. Fuentes del ejecutivo habían revelado que no se excluía la posibilidad de emitir un decreto de urgencia para que se bloquee el procedimiento, después de que el equipo de voluntarios que se ocupan del caso en la clínica La Quiete de Udine, anunció que procederá con lo previsto.

El "protocolo de muerte" prevé la progresiva reducción del alimento y el agua que recibe la mujer por sonda nasogástrica, hasta eliminarlo del todo, lo que la llevará a la muerte.