Las dos mezquitas atacadas son las de Model Town y Ghardhi Shahu. Los activistas portaban armas de gran calibre y algunos chalecos cargados de explosivos. Comenzaron lanzando granadas e inmediatamente dispararon indiscriminadamente contra los fieles que escuchaban la plegaria de los viernes.

Un grupo asociado a los talibanes y a la red terrorista Al Qaida reivindicó las acciones en llamadas a medios locales. Sayyad Bhutta, un funcionario del ayuntamiento, señaló que la cifra de víctimas mortales podría aumentar, ya que algunos heridos se encuentran en estado muy grave. "Al menos uno de los atacantes fue capturado por la policía", señaló Sajjad Bhutta.

"Aceptamos la responsabilidad de los ataques contra los Ahmadi, quienes no aceptan al profeta Mahoma como al último de los profetas, tienen indulgencia en las conspiraciones contra los muyahidines (combatientes de Dios) y cooperan con los los judíos en las sacrílegas caricaturas del profeta de Facebook y Youtube", señalaron los atacantes en su reivindicación. "Con estos ataques damos las últimas advertencias a los Ahmadis para que abandonen Pakistán o mueran a manos de los amantes del profeta", añaden los terroristas.

La ciudad de Lahore fue escenario de numerosos ataques sangrientos en los últimos meses. Sin embargo, el de hoy es el más duro contra la comunidad Ahmadi, declarada "no musulmana" en Pakistán en 1974.