Ruben López, el hijo de López, indicó a la prensa que "se hicieron varias excavaciones con resultados negativos" y aclaró: "Queremos esperar hasta mañana tranquilos, sin ponernos nerviosos, para poder actuar como corresponde. Quiero encontrar su cuerpo, ojalá esta sea la última vez que lo buscan".

Las tareas están a cargo de personal de Bomberos de la Policía Federal y del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) en el área demarcada ayer por dos georadares de la Dirección de Inteligencia Criminal del Ministerio de Seguridad nacional, que detectaron los sitios donde cambió la morfología del terreno, y en pozos ciegos y de agua próximos al lugar.

La zona, a pocas cuadras de la escuela de la Policía Bonaerense "Juan Vucetich", permanece vallada y custodiada por efectivos de la Policía Federal y de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).

"Las excavaciones se concentran en el área cercana a la estación de trenes, donde los georadares marcaron los puntos donde hubo alteraciones en la tierra", señaló Nilda Eloy, testigo y querellante en la causa contra el represor Miguel Etchecolatz, al igual que López, con quien compartió la reclusión ilegal en el centro clandestino de Arana durante la dictadura.

En tanto, fuentes vinculadas a la fiscalía de Hernán Schapiro dejaron trascender que, tal como lo habían solicitado organismos de derechos humanos, se citó al testigo de identidad reservada para que amplíe el informe y dé más precisiones sobre el lugar en que habría sido ocultado López.

Se supo que el testigo, por razones de seguridad, no concurrió a la sede de la Fiscalía Federal de La Plata, pero su abogado, Alejandro Sánchez Kalbermatten, habría tomado contacto con las autoridades judiciales para coordinar una próxima reunión con las garantías que exige la reserva de identidad.

La abogada de la Liga Argentina por los Derechos del Hombre (LADH) Guadalupe Godoy, que reclamó al fiscal la ampliación del testimonio de quien hizo reserva de identidad y del abogado, dijo que los trabajos "continuarán los próximos días" y advirtió que "mantenemos reserva y cautela para no caer en decepciones".

En la víspera se realizó el desmalezado de la zona de búsqueda donde los peritos determinaron diez sectores en los que el georadar utilizado marcó alteraciones morfológicas bajo la tierra a una profundidad de hasta dos metros, áreas que hoy comenzaron a ser analizadas previo a proceder a la excavación.

Alfredo Gascón, abogado de la familia López, señaló que están "todos expectantes" y que "después de casi cuatro años y medio de espera y de incertidumbre" se buscan "certezas para ver si se puede de alguna manera empezar a cicatrizar esta herida tan importante".

La búsqueda se ordenó luego de que un testigo de identidad reservada aseguró saber dónde habían enterrado el cuerpo del albañil, que se encuentra desaparecido desde el 18 de septiembre de 2006 mientras se realizaba el juicio contra Etchecolatz por delitos de lesa humanidad cometidos en la última dictadura.