La protesta tuvo lugar en la esquina de Hipólito Yrigoyen y avenida 9 de Julio. Livingston explicó que "cuando quiero reformar algo que ya existe lo primero que hago es consultar a la familia para saber qué es lo que quiere y necesita. Acá no consultaron a ningún vecino". Es que el gobierno porteño decidió construir carriles exclusivos para el transporte público sobre esa avenida, entre los barrios de Constitución y la zona de Retiro, con el propósito de "achicar el tiempo de traslado" hacia el microcentro porteño y eliminar así la proliferación de automóviles.

Para ello lleva talados unas 200 especies arbóreas que rodean la avenida 9 de Julio, mientras que las organizaciones vecinales estiman que se quitarán otras 300, al tiempo que se planifica reducir la Plaza de la República, situada en torno al Obelisco, para que paseen las unidades de transporte público.

Nidia Marinaro, de Propuesta Area Metropolitana Buenos Aires (Proamba), aseguró que el jefe de gobierno Mauricio Macri "está desfigurando la postal más importante que tenemos los porteños, el daño ambiental que produce con la tala de árboles es irrecuperable", y explicó además que los árboles "no pueden ser trasplantados a otro sector", tal como figura en la propuesta original.

“Es una convocatoria ciudadana desde distintas organizaciones para reclamar que se detenga el avance de las obras y se cumplan las normas vigentes”, explicó Nidia Marinaro, fundadora de la agrupación que aborda cuestiones del área metropolitana Propamba.

En tanto, la legisladora del Frente Progresista Popular, María Elena Naddeo, consideró que “Macri y Rodríguez Larreta ignoran los procedimientos democráticos, avanzan de manera autoritaria con negativas consecuencias para la vida de los porteños. Se sienten dueños de la Ciudad, es una gestión que no consulta a la oposición ni a la sociedad civil, actúan como patrones de estancia o dueños de una empresa privada, así están manejando los asuntos públicos en la Ciudad”.

“Se van a gastar 166 millones de pesos para destruir la avenida más emblemática de la Ciudad con el solo fin de colocar paradas con techo, cuando bien podrían estar ubicadas en los laterales y sin necesidad de arrasar con la 9 de Julio. O los funcionarios del gobierno de Macri provienen de otro planeta o estamos ante un gigantesco negocio, imposible de justificar con argumentaciones sensatas, opinó el diputado porteño Adrián Camps, del Partido Socialista Auténtico.