Las conversaciones quedaron congeladas desde septiembre de 2010, cuando Israel se negó a detener la construcción de colonias en Cisjordania y Jerusalén Este. Tres años después, el gobierno israelí no parece ceder en esa decisión, pero como prueba de buena voluntad decidió liberar a 104 prisioneros palestinos detenidos. Ese gesto fue tomado con beneplácito por la Autoridad palestina.

"Es un día muy especial", declaró el presidente israelí Shimon Peres respecto de la mesa de negociación que comenzó hoy y se extenderá hasta mañana y agregó: "Medio Oriente se encuentra en una situación tempestuosa, esperamos que supere la tormenta y pueda lograr la paz".

"Estas negociaciones serán una ocasión de desarrollar un plan de trabajo que determinará cómo las partes procederán en las negociaciones en el curso de los próximos meses", señaló el departamento de Estado, encabezado por Kerry.

El diario israelí Yediot Aharonot rechazó la liberación de presos palestinos al titular en primera página: "Los asesinos van a ser liberados". Sólo el diario de izquierda Haaretz recibía con optimismo la decisión: "El gobierno israelí decidió el domingo mirar la realidad a la cara".

"Hay momentos dónde se deben tomar decisiones difíciles para el bien del país y éste es uno de esos momentos", afirmó por su parte Netanyahu ante sus ministros en el comienzo de la reunión.