Esta mañana, la línea B prestaba nuevamente esta mañana un servicio reducido entre su cabecera de Leandro N. Alem y Los Incas, debido a que los trabajadores mantienen su reclamo y no conducen hasta las nuevas estaciones, Echeverría y Juan Manuel de Rosas, por la "falta de seguridad" en esas paradas.

"Hemos llegado a un acuerdo parcial, porque presentamos una propuesta sobre los problemas de electricidad, que son los más graves y los que pueden ocasionar riesgo de vida, que se seguirán estudiando el martes próximo" a las 10, dijo el secretario general de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP), Robertro Pianelli.

"La propuesta que llevamos a la reunión consistió en nombrar una comisión para revisar el estado de las instalaciones, y elaborar un plan para solucionar los graves problemas que presenta el nuevo trayecto de la Línea B en materia -sobre todo- de electricidad, lo que será estudiado por las empresas", precisó.

En tanto, Pianelli dijo que "hubo un avance en lo que respecta a las comunicaciones". "Aceptamos hasta tanto se instale el sistema tierra-tren apropiado para la actividad, manejarnos con una opción paliativa", afirmó el metrodelegado. No obstante, sostuvo que "seguimos con la medida que implementamos desde el día en que se inauguraron las estaciones de Esteban Echeverría y J.M. Rosas".

Hace una semana, los conductores y guardas de la línea B iniciaron una medida de fuerza porque aseguran que la extensión del túnel y las nuevas estaciones "tienen una precariedad criminal" que pondrían en riesgo "las vidas" de los empleados y los usuarios. Ante ello, Metrovías dispuso "un esquema especial con instructores y supervisores de tráfico, personal habilitado y capacitado para conducir trenes" para que las formaciones pudieran llegar a las dos nuevas estaciones, pero decidió interrumpirlo a principios de esta semana.