En la mañana, más de 9 mil personas volvieron a tomar las calles de Mong Kok, uno de las tres zonas ocupadas por los manifestantes desde el 28 de septiembre, en una noche que terminó con la detención de 26 personas. Las fuerzas de seguridad reprimieron las protestas durante cuatro horas y luego se replegaron dejando el área en manos del movimiento estudiantil, que rápidamente comenzó a levantar barricadas.

"La Policía condena enérgicamente a quienes han participado en esta asamblea ilegal, y recuerda que ha sido extremadamente tolerante con los manifestantes en aras de la calma hasta este momento", declaró el comisario Andy Tsang Wai Hung.

En una relativa calma, la zona de Mong Kok, emblema de las protestas por tratarse de un barrio de clase obrera, amaneció nuevamente tomada por los estudiantes aunque rodeada por cordones policiales. Las organizaciones que lideran las protesta desconfían de que el diálogo llegue a concretarse porque las autoridades muestran por un lado interés en resolver el conflicto, pero por otro movilizan a cientos de policías para desalojar las manifestaciones.