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Los trabajadores de la Dirección Nacional de Atención a Grupos en Situación de Vulnerabilidad (DNGV) y del Centro de Asistencia a Víctimas de Violaciones de Derechos Humanos, “Fernando Ulloa”, denunciaron el "vaciamiento" de esas áreas a través de nuevos despidos y la confección de "listas negras" con la que se "persigue" a los empleados.

Los empleados se encuentran en estado de "asamblea permanente" desde el 11 de marzo "como respuesta a los nuevos despidos que se vienen sucediendo" y frente a las presiones que sufren desde el Ministerio de Justicia, a cargo de Germán Garavano.

Según afirmaron, las autoridades de esa cartera no les concedieron una reunión para explicarles la situación laboral en que se encuentran y "sólo obtuvimos encuentros casuales e informales en los que (se les) manifestó desconocer los despidos, las causas de los mismos y la existencia de listas (negras".

"La Dirección Nacional de Atención a Grupos en Situación de Vulnerabilidad es la responsable de llevar adelante políticas públicas en materia de protección de derechos humanos vinculadas a niñez, identidad, afro-descendientes, migrantes, discapacidad, género, adultos mayores, pueblos originarios, bioética y salud mental", explicaron a través de una gacetilla.

El Centro Ulloa, en tanto, "fue creado para garantizar la asistencia integral y el acompañamiento en procesos judiciales de víctimas-testigo del terrorismo de Estado, de violaciones de derechos humanos en contexto democrático y de la tragedia de Cromañón".