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La Cámara de Diputados aprobó por en general por 197 votos contra 4 el proyecto de ley de fortalecimiento de la industria autopartista, que otorga beneficios fiscales a las terminales automotrices, y de maquinarias agricolas que compren piezas o autopartes nacionales.

El proyecto fue impulsado por el diputado y sindicalista de Smata, Oscar Romero, quien en la sesión aseguró que la apuesta es llevar "la integración nacional de vehículos del 20 al 30 por ciento", lo que generaría "120 mil puestos de trabajo nuevos".

"Este proyecto no es solo para beneficiar a los afiliados de Smata, sino de la UOM, de los químicos, los plásticos, los textiles, ya que un millón y medio de trabajadores corresponde a la cadena de valor de la metalmecánica", sostuvo. Además, Romero descartó que se busque "beneficiar a las terminales automotrices", argumento que tomó el Frente de Izquierda para rechazar la iniciativa.

El diputado de Smata también criticó a su colega y exministro de Economía Axel Kicillof por "haber trabado la ley durante tres años", pero la diputada del Frente para la Victoria (FpV), Juliana Di Tullio, recordó que los proyectos recaían en la Comisión de Industria, cuyo titular era un radical, Mario Barletta.

En su discurso, Romero agradeció el respaldo que tuvo para sacar la ley del presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, al jefe de la bancada del PRO, Nicolás Massot, y Laspina que ayudaron a "coordinar el trabajo de las comisiones" y todos los bloques que se "comprometieron con esta ley".

En tanto, según difundió el parlamentario.com, el diputado del FpV y referente de la UOM Zárate-Campana Abel Furlán fue quien adelantó el apoyo del bloque, pero advirtió que “el problema central es la política económica del gobierno" de Mauricio Macri. "El proyecto por sí solo no va a resolver todos los problemas de la industria automotriz”, señaló.