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Si se confirman las estimaciones privadas para la inflación en lo que resta de 2016, en diciembre la pérdida salarial acumulada durante doce meses irá desde los 13 mil pesos para un oficial del convenio de metalúrgicos hasta más de 21 mil pesos para la administración pública nacional. De acuerdo con un documento elaborado por el Centro de Estudios del Trabajo y el Desarrollo (CETyD) la magnitud de la reparación que deberían recibir los asalariados el próximo mes para compensar la reducción en su poder de compra, con una suma fija por única vez, representa entre 6,5 y 10,5 veces la propuesta oficial para el desinflado “bono de fin de año”.

A pesar de la persistencia de un escenario de deterioro del mercado de trabajo y los ingresos reales de los asalariados, desde la Casa Rosada insisten en que el pago de la suma extraordinaria no es obligatorio. La cifra sugerida por la Mesa de Diálogo donde participaron cámaras empresarias, la CGT y el gobierno fue 2000 pesos pero, según indicaron versiones periodísticas, el adicional por única vez en el sector público llegaría hasta los 3500 pesos en el caso de los trabajadores con menores salarios.

El Boletín Nº2 del CETyD que depende de la Universidad de San Martín ofrece una estimación de la pérdida salarial acumulada desde diciembre de 2015 para categorías ocupacionales representativas de un conjunto de convenios colectivos: metalúrgicos, administración pública, encargados de edificio y maestranza. En los primeros dos casos terminarán el año con un retroceso en sus ingresos de 12.899 y 21.225 pesos, respectivamente. En tanto, la merma interanual en diciembre llegará hasta 13.774 pesos para los trabajadores de maestranza y 15.655 pesos en el caso de los encargados. Ese es el monto que debería tener el pago adicional si el objetivo fuera compensar el deterioro registrado en 2016.

“Frente a este escenario de desgranamiento permanente de las condiciones de vida materiales de los trabajadores y sus familias, que además explica gran parte del comportamiento negativo de las principales variables macroeconómicas como el consumo y la inversión, es impostergable la implementación de medidas tendientes a compensar la pérdida del poder adquisitivo de los salarios”, reza el informe del centro de estudios encabezado por el ex ministro de Trabajo y legislador porteño del FpV Carlos Tomada.

Antes de realizar el ejercicio hasta diciembre para los cuatro sectores representativos seleccionados, los investigadores del CETyD estimaron, a partir de la información oficial disponible, la pérdida de poder adquisitivo hasta julio de 2015. De este modo, calcularon que para recuperar el poder de compra perdido hasta ese momento en un salario de bolsillo representativo del conjunto de los asalariados privados (alcanzaba los 12.567 pesos), se necesita una suma de, como mínimo, 6.588 pesos. Por su parte, para que el salario real del mes de julio de 2016 hubiera sido equivalente al salario de noviembre de 2015, se hubiera necesitado un aumento de cerca de 1500 pesos adicionales (monto que implica un 12% del salario de julio). “Es obvio que el aumento hipotético de 1500 pesos no debería ser por única vez, sino que tendría que mantenerse mensualmente un incremento del salario similar al que se produce en el costo de vida, con el fin de lograr que el efecto recuperación resulte real. Asimismo, el resultado de este mantenimiento de valor adquisitivo del salario debería ser el que se tome como base para la actualización 2017.

Ese mismo cálculo para los sectores elegidos en el mes de diciembre implica que el monto adicional para que el salario de diciembre sea equivalente al de noviembre del año pasado, oscila entre 750 pesos para un oficial de primera de Maestranza y 2000 pesos en la categoría encargado permanente sin vivienda del convenio de Encargados de Edificio.