CARTAS DE PARÍS,
de Julie Bertucelli. Con E. Gorintin, N. Khomasuridze y D. Drukarova.
2003, 103 min. AVH.

La ganadora del César 2003 a la Mejor Opera Prima Francesa transcurre entre la ex república soviética de Georgia y París. Una abuela, una hija y su nieta viven pendientes de las cartas que manda el hijo mayor, que se fue en busca de trabajo a la capital francesa. Hasta que ocurre cierta desgracia. Pero –en una vuelta de tuerca que parece tomada directamente del cuento de Cortázar La salud de los enfermos– la hija y la nieta se ocuparán de que la anciana crea que todo sigue igual. Con extrema sencillez y un enfoque semidocumentalista, al mismo tiempo que desarrolla esta historia de ficción la debutante Bertucelli (que se formó junto a Kieslowski y el georgiano Otar Iosseliani) muestra también la vida contemporánea en Tiflis, así como la complicada transición del stalinismo al post-socialismo.



WIMBLEDON,
de Richard Loncraine. Con Paul Bettany, Kirsten Dunst y Sam Elliot.
2004, 98 min. AVH.

Comedias románticas como las que le gustan a Hollywood, pero con un toque de acidez e inteligencia inglesas: esa parece la fórmula de la compañía londinense Working Title, creadores de Un lugar llamado Notting Hill y El diario de Bridget Jones, entre otras. Wimbledon, que ahora se edita directamente en video, reitera la fórmula y vuelve a exhibir logros y flaquezas. Todo transcurre en el mundo del tenis, cuando un jugador veterano en plena caída (Paul Bettany, el naturalista buenmozote de Capitán de mar y de guerra) tiene la última oportunidad de su carrera. Sumamente autocrítico, el hombre va a menos, pero como al mismo tiempo inicia un romance con una jugadora estadounidense (Kirsten Dunst), de pronto comienza a irle bien en el juego y en el amor. Limitada y agradable.



MI AMIGO NICHOLAS NICKLEBY,
de D. McGrath. Con Charlie Hunnam, Jim Broadbent y Ch. Plummer.
2003, 133 min. Gativideo.

Típica novela de iniciación alla Dickens, Nicholas Nickleby recibe, por parte del realizador y guionista Douglas McGrath (que ya se había probado con los clásicos cuando abordó Emma) un tratamiento mucho más desacartonado que lo habitual en el temible rubro “Adaptaciones de Clásicos de la Lengua Inglesa”. Tras la bancarrota y muerte del pater familias, los miembros de un acomodado clan deben salir a pucherear como pueden, dispersándose por toda Inglaterra y diciéndole sí a lo que les ofrezcan. Nicholas, el mayor, es destinado por su despiadado tío a una suerte de purgatorio sobre la tierra, conducido por un monstruoso matrimonio. Es sólo el comienzo de una aventura en la que la rueda de la fortuna gira loca. Y al cabo de la cual tal vez el muchacho devenga hombre.



AMOR IMPOSIBLE,
de Ian Iqbal Rashid. Con Jimi Mistry, Kyle MacLachlan y Birian George.
2003, 90 min. LK-Tel.

Touch of Pink (“Un toque de rosa”) es el título original de esta comedia canadiense, en la que un muchacho de origen indio (Jimi Mistry, estrella del cine de ese país) se entera de la próxima visita de su muy tradicional y autoritaria mamá, que viene decidida a casarlo. Lo que mamá no sabe es que el nene tiene novio. El chico intentará que mami se crea que los dos viven juntos porque son amigos, nada más. Lo más llamativo del film es la presencia del “amigo imaginario” del protagonista, que no es otro que Cary Grant. Personificado por un Kyle MacLachlan trajeado y de gomina, es posible que su Cary luzca demasiado envarado. Pero el actor logró copiar al detalle su inconfundible fraseo, redondeando una divertida caricatura de quien tal vez haya sido el gay más encubierto de todo Hollywood.