El ex apoderado de la Asociación Madres de Plaza de Mayo Sergio Schoklender golpeó la puerta del juzgado de Norberto Oyarbide sorpresivamente ayer por la mañana. Llevaba ocho cajas de documentación y la expectativa de que le tomaran una declaración espontánea. Pero no sólo fracasó en su intento, sino que se topó con la noticia de que el juez había ordenado la inhibición general de sus bienes, al igual que la de los otros ocho imputados –entre ellos su hermano Pablo– y de las empresas investigadas. La sede de Meldorek S. A. fue allanada por segunda vez, ya que en el procedimiento del viernes último los investigadores no habían podido abrir las cajas fuertes. Al final, encontraron chequeras, documentos contables y dos armas, cuya legalidad aún no se estableció.

Todo parece indicar que Oyarbide no le quiere tomar declaración a Schoklender hasta tener en su poder y estudiadas todas las pruebas que podrían comprometerlo. A juzgar por los dictámenes presentados por el fiscal antilavado Raúl Pleé y por el fiscal Jorge Di Lello, son altas las chances de que sea llamado a indagatoria por el posible desvío de fondos. En principio, los delitos en juego son lavado de dinero, defraudación a la administración pública y asociación ilícita.

Meldorek, de la que Schoklender resultó ser principal accionista, fue creada en 2003 con la firma de dos prestanombres jubiladas. Desde diciembre de 2010, él figura como director titular y como presidente, Alejandro Gotkin (empleado de Madres), quien a su vez es titular de Antártica, una firma que se sospecha habría sido utilizada para ocultar el destino real de los fondos públicos asignados a viviendas. A la cuenta bancaria de Antártica llegaban cheques emitidos o endosados por las Madres, con intervención de su apoderado. Así lo señaló Pleé, quien incluso advirtió que esa firma y Schoklender “registran el mismo domicilio” ante la AFIP: Alvarez Thomas 198, sede de Meldorek. Su denuncia, que originó la causa a cargo de Oyarbide, habla de un posible desvío de unos 4,8 millones de pesos. Es plata que se retiró por ventanilla, lo que dificulta seguir su ruta.

El viernes último, cuando efectivos de la División de Investigación Federal del Crimen Organizado (Difoc) de la Policía Federal allanaron Meldorek, se llevaron documentación de todo tipo, pero no lograron abrir las cajas fuertes, algo que finalmente consiguieron ayer. Según fuentes de la causa, había chequeras y documentación, pero lo que sorprendió a los investigadores fue que había una escopeta calibre 16 y una carabina calibre 22, que ahora el juez intenta determinar si están debidamente registradas.

La inhibición general de bienes fue dispuesta por Oyarbide para evitar que tanto Schoklender como el resto de los imputados hicieran movimientos que puedan modificar sus situaciones patrimoniales o accionarias. El titular de la Unidad de Información Financiera (UIF), José Sbatella, explicó que en su presentación de ochenta páginas ante el fiscal Pleé consta que el dinero para la construcción de las viviendas “lo ponía la Fundación (Madres de Plaza de Mayo)”, pero luego intervenía “un listado de empresas” que “en algunos casos” tenían “movimientos no tan claros”. Explicó que sería una típica maniobra “para hacer perder el rastro del dinero en una empresa pantalla, de eso se trata este tema”.

Las empresas que componen el entramado dudoso están vinculadas con Schoklender, y algunas también a Gotkin y a otros de los implicados. Además de Meldorek y Antártica, figuran Stylo Car S. R. L., Regie Royale S. A., Gorlac S. A., Monetización S. A., Armorin Systems S. A. e Eagle Security Investigation S. A., entre otras. El fiscal Di Lello sostuvo en su dictamen que “constituirían sociedades pantalla a través de las cuales se hace posible el blanqueo de los fondos o para el desvío directo de los fondos públicos involucrados, los que en vez de destinarse a las obras en cuestión son utilizados en provecho propio o de terceros”. El dinero, recordó en su presentación de la semana pasada, provenía la Subsecretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda, de la Secretaría de Obras Públicas del Ministerio de Planificación Federal y se ocupaba de administrarlos Schoklender como apoderado de Madres.

Di Lello señaló en declaraciones al programa Rayos X que Meldorek tendría como única actividad la construcción de viviendas sociales para la Misión Sueños compartidos de Madres de Plaza de Mayo.