CULTURA
El oficio de agruparse
Era una vieja y callada aspiración de los escritores, que decidieron jaquear la soledad del oficio y agruparse. La Sociedad de Escritoras y Escritores de la Argentina (SEA) se creó en marzo de 2001 para defender los derechos gremiales de los escritores que ya no se sentían representados por la otra entidad de escritores, la SADE (Sociedad Argentina de Escritores), deslegitimada, según cuenta Víctor Redondo, por un puñado de dirigentes que se manejan con un sistema de clientelismo y fraude electoral. La SEA, que se financia con una cuota de 10 pesos mensuales, tiene más de 300 asociados en Buenos Aires, pero también funciona en distintas ciudades del interior; hay 100 escritores afiliados en Santa Fe y Córdoba y 700 socios adherentes en el resto del país. Griselda Gambaro, Noé Jitrik, Luisa Valenzuela, Beatriz Sarlo, Alan Pauls, Horacio González, Tomás Eloy Martínez, Martín Caparrós y Leopoldo Brizuela, entre otros, son algunos de los escritores que integran la entidad.