La Selección Argentina de Básquetbol ya conoce a sus rivales del Mundial de Turquía. Tras el sorteo llevado a cabo ayer en Estambul, la fortuna determinó que el conjunto de Sergio Hernández accediera como cabeza de serie al Grupo A, una zona clasificatoria no muy complicada, aunque el eventual cruce de octavos de final puede ser muy peligroso, teniendo en cuenta que el rival surgirá del B, a priori el más difícil de todos. Más allá de esa situación, el entrenador Sergio Hernández se mostró conforme con el programa que tendrá su equipo por delante.

De acuerdo con lo que determinó el sorteo, Argentina integrará el Grupo A, junto con Serbia, Australia, Alemania, Angola y Jordania, con sede en Kayseri. El estreno está previsto para el sábado 28 de agosto ante los alemanes, uno de los cuatro equipos invitados ya que no habían logrado su plaza en el Europeo del año pasado. Un día después, el rival será Australia, equipo al que Argentina superó con facilidad en los Juegos Olímpicos de Beijing. El lunes 30, el conjunto de Hernández jugará ante Angola, el histórico representante del continente africano, mientras que al día siguiente tendrá jornada libre. Para cerrar la fase inicial, el conjunto argentino se medirá el miércoles 1° con Jordania, el adversario más sencillo de la zona, y el jueves 2 ante Serbia, una selección que está en plena renovación, con muchos jóvenes talentosos.

De esa zona, los cuatro primeros avanzarán a los octavos de final y se cruzarán ante los conjuntos del Grupo B, que estará integrado por Estados Unidos, Croacia, Brasil, Eslovenia, Irán y Túnez. Por ese motivo, es fundamental evitar el cuarto puesto en la ronda inicial, para no cruzarse tan pronto con el Dream Team, si es que se cumple la lógica y los NBA se llevan su zona. Igualmente, Croacia, Eslovenia y Brasil no serían adversarios sencillos para una etapa tan temprana del torneo.

Conocido el fixture, Hernández se mostró conforme con los rivales argentinos, aunque marcó el peligro de los eventuales cruces de los octavos. “El grupo que nos ha tocado es accesible, pero lo complicado llega en el cruce de octavos de final, donde podemos enfrentar a Croacia, Eslovenia o Brasil, tres adversarios de fuste”, analizó el entrenador argentino, que igualmente reconoció que también hubo una dosis de fortuna en evitar a otros conjuntos potentes en esa instancia. “Lo importante ha sido que no chocaremos con rivales poderosos como España, Grecia o la propia Turquía, que por ser local siempre se hace mucho más difícil”, sostuvo el actual técnico de Peñarol en la Liga Nacional.

Pero más allá de la fortuna del sorteo, Hernández se mostró confiado en el potencial de sus jugadores. “En la primera fase deberemos enfrentarnos a rivales duros como Alemania y Serbia, pero estoy seguro de que Argentina hará un buen torneo y se clasificará muy bien”, remarcó el bahiense, que por ahora no quiere preocuparse en saber con qué plantel podrá contar en Turquía. “Todavía faltan 255 días y es prematuro decir si los jugadores de la Generación Dorada estarán. Falta mucho tiempo para que finalicen las distintas competencias”, comentó el entrenador, que dejó en claro que está convencido de la presencia de la mayoría en el Mundial. “Todos los jugadores que forman parte del seleccionado tienen el talento y el compromiso para estar, y eso sin dudas es sumamente importante. Es un grupo de jugadores ganadores y que han dado mucho por la camiseta del seleccionado argentino”, indicó Hernández.