El ministro de Deportes brasileño, Orlando Silva, respondió a las críticas del presidente de la FIFA, Joseph Blatter, sobre el atraso en las obras para el Mundial de 2014 y aseguró que los trabajos en diez de las 12 ciudades sede “siguen a todo vapor”.

Temprano, el dirigente suizo había afirmado que Brasil presenta un gran retraso en sus preparativos para el Mundial de 2014, señalando que Río de Janeiro y San Pablo podrían no estar preparadas para recibir la Copa de las Confederaciones en 2013. “Si se hace una comparación entre Sudáfrica y Brasil tres años antes del Mundial, Brasil está detrás de Sudáfrica. No debería decirse, pero es un hecho”, declaró.

“Tenemos problemas con los estadios de Natal y de San Pablo, pero en las demás ciudades las obras siguen a todo vapor”, afirmó Silva en respuesta. “Entiendo la ansiedad y preocupación de la FIFA, pero no tenemos que debatir con la FIFA y sí trabajar para que el cronograma se acerque a su cumplimiento”, afirmó el ministro, que invitó a Blatter a viajar a Brasil para supervisar él mismo las obras. “Así se quedará tranquilo de que Brasil realizará un gran Mundial”, agregó.

Sin embargo, Silva reconoció su preocupación con el estado de las obras en el sector de transporte, especialmente de los aeropuertos, que se encuentran al borde del colapso operacional y que en los últimos años se vieron desbordados por atrasos y cancelaciones repetidas de vuelos. “El 70 por ciento de los proyectos de movilidad necesitan comenzar en 2011”, afirmó.

Para el Mundial 2014 hay previstas 12 sedes: Río, San Pablo, Belo Horizonte, Porto Alegre, Brasilia, Curitiba, Manaos, Natal, Fortaleza, Recife, Salvador y Cuiabá. En el estadio Maracaná, actualmente cerrado por renovación, debe jugarse la final. Para el partido inaugural, San Pablo es la favorita, pero aún no comenzó la construcción del nuevo estadio previsto.