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Les llegó el turno a los “de allá”. Luego de la gira por Centro y Norteamérica con los futbolistas que actúan en el medio local, la Selección Argentina, integrada por jugadores que se desempeñan en el exterior, afrontará esta tarde su primer compromiso serio tras el fracaso en el Mundial de Japón y Corea. El rival será Holanda, que se presenta con todo su potencial y que también tiene la misión de reivindicarse ante su gente por no haberse clasificado para la última Copa del Mundo. Por eso, con dos planteles plagados de estrellas pero en deuda ante su público, el partido de esta tarde en el Amsterdam Arena es una buena ocasión para que ambos comiencen a saldarla.
Como si en junio del año pasado nada hubiera sucedido, la Selección Argentina de Marcelo Bielsa se presentará ante Holanda. De los once titulares que esta tarde pisarán la cancha, nueve estuvieron en el fatídico empate ante Suecia en Miyagi, que significó el pasaje de vuelta a casa en primera ronda. Apenas Julio Cruz, reemplazante del lesionado Hernán Crespo y del ya retirado de la Selección Gabriel Batistuta, será la cara nueva que presente el equipo en el arranque. El otro que no estuvo en aquella ocasión fue Roberto Ayala, por entonces desgarrado, pero se trata de un histórico del ciclo Bielsa. Es que el entrenador sigue confiando ciegamente en sus jugadores y en su esquema, así que habrá que acostumbrarse otra vez a ello.
Pero a diferencia de lo que ocurrió en el Mundial, Bielsa dispondrá los ingresos, juntos, de Pablo Aimar y Juan Sebastián Verón. La ausencia de Diego Simeone y la lesión de Matías Almeyda posibilitarán que el jugador del Manchester se retrase a la posición de volante central, ingresando Aimar como conductor. Esa variante supone que el equipo tendrá mayores chances de generar juego, algo que se le viene reclamando al entrenador desde hace mucho tiempo. El resto parece conocido: Claudio López y Ariel Ortega intentarán abrir la cancha por los costados, mientras que Juan Pablo Sorin y Javier Zanetti buscarán sorprender con sus subidas.
Del otro lado estará Holanda, que está intentando borrar su imagen tras el frustrante paso de Louis van Gaal como técnico, que dejó como resultado a una de las potencias europeas afuera del Mundial. Con jugadores como Clarence Seedorf, Patrick Kluivert, Edgar Davids, Roy Makaay o Ruud van Nistelrooy (probablemente en el banco), la sensación es que no tardarán demasiado tiempo en conseguirlo. Por eso, el examen de hoy pinta complicado, pero al mismo tiempo muy atractivo.