Ya no es la sensación ni la revelación. Arsenal dejó de ser una de las tantas cenicientas de la Primera División del fútbol argentino. Ayer dio una muestra más de que está para pelear arriba. El conjunto de Sarandí, con un gol de Juan Pablo Caffa, derrotó 1-0 a Lanús como local, y con ese resultado se trepó, de forma transitoria, a la punta del Torneo Inicial junto a Newell’s. El equipo del Sur del Gran Buenos Aires, en cambio, sumó su tercer traspié en el certamen y tiene apenas cuatro unidades.

En líneas generales, el encuentro fue parejo. La pelota, lejos de merodear con frecuencia por las áreas salvo a través de tiros de esquina o faltas, estuvo casi la mayor parte del tiempo en el mediocampo. Allí, Ortiz y Marcone le ganaron el duelo a Fritzler y Pizarro, y fue por eso que el dueño de casa tuvo más la posesión, aunque no logró profundidad en ataque, salvo algunas insistencias de Zelaya y Carbonero que inquietaron a Marchesín. Lanús, por su parte, sin tener tanto la pelota, sí dispuso de dos situaciones de gol, en los pies de Ayala, con un bombazo bien desviado por Campestrini y un cabezazo de Benítez de pique al suelo, que se fue cerca del ángulo izquierdo.

No obstante, los de Sarandí fueron los que golpearon apenas comenzado el segundo tiempo. Caffa ejecutó un tiro libre desde la derecha, y la pelota, que no fue tocada por nadie, sorprendió a Marchesín y se metió contra el palo derecho. Con la receta característica, el conjunto de Gustavo Alfaro, con su trabajo hecho, apostó a resguardarse para salir de contra. Lanús dispuso de la pelota y a pesar de algunas llegadas con remates de Ayala y un mano a mano que Castillejos no supo definir, no tuvo oportunidades claras. En cambio, Arsenal estuvo cerca de anotar el segundo con un remate del ingresado Espinoza, que se fue cerca del palo.

Triunfo y liderazgo para Arsenal. El último campeón no afloja y quiere seguir prendido arriba. Del otro lado, Lanús todavía no levanta su nivel.