Desde Río de Janeiro

Llegó el día del debut mundialista frente a Bosnia desde las 19 en el legendario Maracaná, y todo parece estar listo para comenzar el camino al título que el equipo liderado por Lionel Messi emprenderá durante los próximos 30 días en Brasil. Bueno, todo menos la formación del equipo argentino, que el entrenador Alejandro Sabella evitó dar ayer durante la conferencia de prensa que debió brindar por cumplimiento de las disposiciones que la FIFA prevé durante las jornadas de reconocimiento del campo de juego del estadio, que tuvo lugar entrada la tarde de ayer. Argentina y Bosnia integran el Grupo F, junto con Irán y Nigeria, que se enfrentarán mañana desde las 16 en el estadio de Curitiba, en el sur brasileño.

“El equipo no lo doy, un poco porque soy escondedor y otro poco porque no lo tengo definido”, se excusó el entrenador argentino frente a las preguntas de la prensa internacional. Luego aclaró que sus dudas guardan relación con “los inconvenientes” físicos que sufrieron algunos de los jugadores durante la preparación, y citó particularmente el caso de Rodrigo Palacio, quien se recupera de un esguince de tobillo que sufrió en el amistoso ante Trinidad y Tobago.

En la jornada del jueves, el DT argentino desconcertó a la prensa con un esquema hiperconservador, con línea de cinco defensores, pero que ayer no se animó a confirmar, por lo que el misterio se revelará apenas unos minutos antes de que comience a girar la pelota. “Evaluaremos cuáles están en las mejores condiciones para afrontar los 90 minutos”, agregó.

Lo curioso es que, según contó el entrenador, ni siquiera los jugadores sabrían cómo se parará el equipo frente al seleccionado europeo que se caracteriza por su poder ofensivo (ver aparte). “Los jugadores no saben el equipo ni yo tampoco. Estoy mitad escondedor y mitad que no he tomado la decisión al ciento por ciento”, insistió y luego contestó con evasivas si el buen nivel de Bosnia en las eliminatorias europeas lo obligó a cambiar el planteo táctico que más ha utilizado con cuatro defensores, tres volantes y tres delanteros.

Con respuestas cortas e imprecisas, Sabella se refirió al rival como “un equipo con jugadores técnicos, de buena calidad, muy altos y con un buen juego aéreo” y repitió su muletilla de que su prioridad es mantener el equilibrio del equipo porque “no se puede atacar bien sin defenderse bien”.

El DT del equipo nacional, que asistió a la conferencia acompañado por el arquero Sergio Romero, también de pocas palabras y quien dijo estar emocionado por el hecho del que el de hoy será “su primera vez en el Maracaná”, se refirió a los polémicos arbitrajes en este inicio de la Copa del Mundo y fue bastante compasivo con los árbitros. “En un partido de fútbol todos podemos cometer errores: los jugadores, los entrenadores y también los árbitros. Es muy difícil ser árbitro. Son los únicos que no tienen hinchada”, apuntó el DT, y remató: “Yo confío en los árbitros”.

Consultado sobre la goleada de Holanda a España, el entrenador comentó que apenas vio los dos primeros goles porque luego la Selección emprendió el viaje desde Belo Horizonte a Barra de Tijuca, en Río de Janeiro. “Igual creo que sería una falta de respeto que yo hablara sobre un equipo rival de la Copa”, dijo Sabella y, por último, sobre las sorpresas en los primeros partidos del Mundial, agregó: “El fútbol está muy parejo. El primer partido es muy difícil porque se juega con mucha presión. No me gusta la palabra favorito. Creo que en los primeros partidos pierde un poco de peso”.