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Portugal y, sobre todo, Cristiano Ronaldo, se acordaron tarde. A pesar de un gol del astro del Real Madrid, el conjunto lusitano apenas venció 2-1 a Ghana y quedó eliminado prematuramente del certamen, por peor diferencia de gol que Estados Unidos. La goleada 4-0 sufrida ante Alemania en el estreno mundialista terminó siendo clave para la eliminación.

Golear y esperar que no hubiese un pacto de no agresión entre alemanes y estadounidenses era lo que necesitaba Portugal para soñar con la clasificación. Y el milagro parecía que se podía consumar cuando Boye cometió una grosera pifia y venció a su propio arco para poner en ventaja al conjunto de Paulo Bento. Portugal llegaba y acumulaba chances de aumentar, pero todavía no se daba el resultado de Alemania.

Pero cuando desde Recife llegó la noticia del gol de Müller, Portugal casi no tuvo tiempo de reaccionar, ya que Ghana llegó al empate con un cabezazo de Gyan. En ese momento, el que tenía más posibilidades era el conjunto africano, que con un tanto más sellaba su pasaje a los octavos de final. Otro cabezazo de Gyan, esta vez en palomita, pareció ser la oportunidad más clara, pero con el balón desviado se esfumaron sus chances.

Y entonces apareció Cristiano Ronaldo. Tras un regalo entre los defensores y el arquero ghanés, el Balón de Oro sacó un zurdazo cruzado para poner el 2-1 y convertir su tercer gol mundialista, uno en cada torneo que participó. Y a partir de allí, con menos de diez minutos y la necesidad de anotar tres goles más, el astro comenzó a tener chances, pero chocó contra su mala fortuna y el arquero Dauda, que le tapó dos mano a mano. Y en otra ocasión tocó apenas por arriba del travesaño. “Intentamos ganar y lo hicimos, pero no alcanzó”, remarcó el atacante, que aseguró que su equipo mereció la clasificación. “Merecíamos más, hicimos lo que pudimos, pero no alcanzó”, se lamentó Cristiano Ronaldo, que se despidió así con más pena que gloria de Brasil 2014.