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“Por el momento, no tenemos buenos rendimientos individuales en los clubes como para alimentar el trabajo en la Selección.” Parece que el flojo nivel del torneo local hace mella en las expectativas del entrenador del representativo argentino, José Pekerman, quien no se siente atraído por los jugadores que actúan en el medio como para convocarlos al seleccionado.
“Ahora, la situación es muy distinta a la época del Mundial de Corea-Japón –aseguró el entrenador en una entrevista con la agencia Télam–. Por entonces, el 90 por ciento de los jugadores de la Selección eran desequilibrantes en sus clubes, con edad madura y estabilidad consolidada. Ahora, en un reciente ranking que hizo FIFA, entre los cien mejores futbolistas del mundo de la actualidad los argentinos sólo tenemos uno: Roberto Ayala”, acotó Pekerman.
Pekerman se refirió al caso de Carlos Tevez, al que no convocó para el último partido que disputó la Selección, contra Venezuela, por las Eliminatorias. “Teníamos dos días para preparar ese partido y no íbamos a tener el tiempo suficiente para contarlo. Entonces quedamos que no lo llamaríamos y después hablaríamos personalmente con el jugador”, explicó.
“Cuando hablamos, le dije que entendía su dolor por no haberlo convocado. Es lógico, en un profesional de su protagonismo. Pero nunca cambié mi idea de que no era lo mejor para el seleccionado que viniera”, afirmó.
“Yo espero que Tevez no tropiece con la misma piedra dos veces. Es un chico de 20 años y si tuvo algún error hay que marcárselo y esperar que lo asimile. Porque tiene todo por delante para corregirlo, sentirse mejor y mantenerse siempre vigente”, opinó.
También se refirió a Ariel Ortega, que volvió a jugar tras un año y medio e integró el plantel campeón de Newell’s. “Lo que Ortega está haciendo no pasa desapercibido –explicó–. Valoro mucho a los jugadores de sus antecedentes. Lo que más contento me pone es que haya podido volver a jugar y que cada vez esté en mejores condiciones.”
Para el entrenador de la Selección Nacional, no hay jugadores intocables en la estructura actual del equipo, y lo ejemplificó con un puesto ocupado por un jugador surgido del medio local: el de arquero, que ocupa actualmente Roberto Abbondanzieri. “Hoy no hay arqueros indiscutidos. Aquellos que uno idealizaba como dueños del puesto por 10 años. Esto se debe a que existe mucha más irregularidad que antes”, analizó.
Con respecto a la convocatoria de los jugadores que actúan en el exterior, el entrenador calificó de “impactante” la “presión que ejercen los clubes de Europa para no ceder a los jugadores”. Y aseguró: “La situación es insostenible. Entiendo que los clubes defienden lo suyo, pero nosotros también debemos proteger al seleccionado, porque se llegó a un punto en que solamente se hace referencia a los reglamentos, ya que el diálogo está roto. Así es imposible seguir”, se lamentó.
Pekerman ejemplificó la situación con el caso de Javier Saviola en el partido ante Venezuela. “Como no era fecha FIFA, el Mónaco lo liberó apenas 48 horas antes del partido, y él llegó a Buenos Aires solamente un día antes. Yo no podía preguntarle cómo se sentía, porque era obvio que quería jugar de entrada”, contó.
“Como la decisión era toda mía, resolví dejarlo en el banco porque no lo veía en buenas condiciones después de haber jugado cuatro días antes y de semejante viaje. Pero a su vez debí explicarle que lo hacía por esa razón y no porque no hubiera rendido en los partidos anteriores”, aclaró. Saviola entró en el complemento y marcó un gol.
“Algunos jugadores entienden estas cosas, otros no –aseguró Pekerman–. Es allí donde yo reclamo que todos deben ser solidarios para con el seleccionado, que tiene muchas responsabilidades ante cada partido, cada torneo que juega. Y no hay tiempo para esperar a nadie. Si uno no rinde, hay que buscar a otro para reemplazarlo”, advirtió.