DEPORTES › SE ACENTUA LA TENSION ANTES DEL CLASICO
Guerra de nervios
“Los ingleses no significan nada”, le atribuyen a Verón.
“Los argentinos no son Superman”, se ataja Eriksson. “¿Clásico? No, clásico es contra Brasil”, relativiza Almeyda. “Si jugamos mal, nos vamos del Mundial”, avisa Beckham. Faltan dos días para el partido más caliente de la Copa del Mundo.
El minutero achica la espera. El tiempo que separa la ansiedad del pitazo inicial de Argentina-Inglaterra, el gran clásico del fútbol moderno mundial, es vivido con distinto espíritu en Naraha, sede de la concentración argentina; en Kobe, donde concentran los ingleses, y en Sapporo, la ciudad que vivirá prácticamente sitiada el viernes, por temor a los enfrentamientos sin cuartel entre barras bravas y hooligans. Las declaraciones que empiezan a cruzarse entre ambos bandos ayudan a calentar el clima previo, con una mezcla de despreocupación y admiración. Desde el respeto o desde el temor, la Selección Argentina sabe que, si gana el partido, se clasifica automáticamente a la segunda ronda; los ingleses son conscientes de que una derrota los deja al filo de la eliminación. El partido, entonces, es doblemente importante, por la historia reciente y por los puntos en juego. Y por eso se dicen ya lo que se dicen:
“Los ingleses no significan nada”
La frase se la atribuyó el sensacionalista The Sun a Juan Sebastián Verón, tergiversando el sentido de las declaraciones del volante del Manchester United. Eso generó una ola de rechazo entre los millones de lectores del tabloide, aunque las declaraciones exactas de Verón fueron las siguientes: “La verdad es que no siento nada especial por los ingleses. Por supuesto que conozco a jugadores de su seleccionado y a muchos muy bien, porque juegan para mi equipo, como por ejemplo David Beckham”. Verón había afirmado que “particularmente” él no estará “jugando contra Inglaterra. Yo estaré haciéndolo para mi país, Argentina, porque nuestra gente espera que ganemos”.
“Los argentinos no son Superman”
El sueco Sven Goran Eriksson trata de levantar la moral de sus dirigidos y apela al sentimiento. Eriksson consideró que “Argentina es un gran equipo” que cuenta con “jugadores fantásticos”, pero está seguro de que no es invencible. “Los argentinos no son supermanes, en absoluto”, dijo para arengar a sus jugadores. “Si no tienes la mentalidad apropiada y piensas que vas a perder, seguro que pierdes”, los aleccionó. “Lo más importante ahora es tratar de recuperar la confianza perdida tras el empate ante Suecia. Nos enfrentamos contra una de las selecciones favoritas y tenemos que afrontar el choque con la moral en lo más alto”, señaló Eriksson.
“El clásico es con Brasil”
Ya fuera porque lo cree, ya porque intenta disminuir a los próximos rivales, Matías Almeyda, uno de los dos jugadores argentinos que ayer tomó contacto con la prensa –la nominación se hace por sorteo–, le quitó cierta jerarquía al partido. “El clásico nuestro es con Brasil, no con Inglaterra –señaló–. Es un encuentro muy importante pero no tiene esa categoría.”
Para el volante central, que difícilmente esté en el partido, “Inglaterra es un rival difícil. Van a ser 90 minutos duros y vamos a tener que estar bien concentrados”, señaló, antes de desestimar otras connotaciones. “El fútbol es un deporte. Hay que tratar de dar un buen espectáculo, no relacionarlo con lo político.” Por último, elogió a Beckham: “El es un gran jugador que se destaca por todo lo que hizo, pero Inglaterra no depende sólo de él, sino que es un gran equipo en conjunto”, aseguró.
“No podemos volver a jugar tan mal”
David Beckham jugará el partido. Lo confirmó Eriksson, pese a que todavía no está totalmente repuesto. “Aún me duele un poco el pie izquierdo, pero no creo que me afecte para jugar el siguiente partido contra Argentina.” El Spice Boy se tomó en serio el papel de salvador e hizo circular un mensaje entre sus compañeros. “No podemos permitirnosjugar de nuevo una segunda parte tan pésima”, como contra Suecia, en el debut, señaló. “De lo contrario vamos a pasarlo mal de verdad.”
Uno de los que entiende de eso es Gareth Southgate. “En el partido contra Nigeria me impresionó Argentina –dijo–. Se mostraron muy fuertes y con unas individualidades excelentes.” Southgate elogió a Batistuta: “Tiene un instinto especial. Jugué contra él tres o cuatro partidos y en todos sobresalió. Es un jugador muy fuerte, que va siempre directo al arco. En cuanto le dejás un metro, encuentra la manera de patear”.
“Son un rival más”
Claudio Husain, el otro futbolista del seleccionado autorizado a opinar ayer, insistió en relativizar la categoría del encuentro. “El partido del próximo viernes no tiene tintes políticos. Es un encuentro más y, para ser campeón, aunque parezca una frase hecha, hay que ganarles a todos”, manifestó. “El equipo está tranquilo, y queremos ganarle no solo a Inglaterra, sino a cualquiera. A todo el que se cruce hay que ganarle”, recalcó. “Por supuesto que para nosotros sería lindo regalarle un triunfo a toda Argentina, sobre todo por el mal momento que pasan muchos de nuestros compatriotas, pero no deja de ser un partido de fútbol”, agregó el futbolista.
Para Diego Simeone, Inglaterra “es el principal rival de la primera fase, por lo que significa el partido para los argentinos y por la posibilidad de ganar y alcanzar la clasificación”. Para Mauricio Pochettino, “ganar ante Inglaterra sería un estímulo muy importante”.