Viernes, 17 de marzo de 2006 | Hoy
DEPORTES › RIVER SUPERO A PAULISTA DE BRASIL POR LA COPA
El equipo de Núñez les ganó 4-1 a los brasileños y no tuvo que revertir el resultado como la semana pasada. Montenegro marcó dos goles y fue la gran figura de la noche.
A diferencia de lo que sucedió en su anterior presentación como local, cuando padeció antes de derrotar a El Nacional, esta vez River no tuvo que sufrir para vencer con claridad a Paulista. El equipo sumó su segunda victoria en el Grupo 8 y ahora encabeza las posiciones con seis puntos, mientras que Libertad tiene cuatro, y más atrás están los brasileños y colombianos.
Desde el principio del juego, River fue en busca de una nueva victoria y rápidamente se paró en el campo de los brasileños. En esta oportunidad, ante la ausencia del estratega Gallardo, el colombiano Patiño tuvo la misión de construir las acciones ofensivas del local, y los laterales eran por donde River elegía incursionar para romper la defensa rival.
Primero Montenegro –tuvo un gran rendimiento– exigió al arquero Rafael cuando lanzó un centro desde la derecha para la entrada de Abán. Y en la segunda aproximación de riesgo, el propio Montenegro eludió rivales por la izquierda, cedió la pelota a Santana que llegaba por el otro lado y el derechazo del ex San Lorenzo se transformó en el primer gol del partido. River volvía a exhibir contundencia y tres minutos más tarde aumentó la diferencia: Montenegro remató en la salida de un tiro libre, y la pelota ingresó por el ángulo izquierdo de Rafael.
A partir de ahí, River se relajó un poco y esperó más retrasado, para luego salir de contraataque y aprovechar la velocidad de sus delanteros. Precisamente, el joven Abán llegó hasta el fondo por la izquierda, y el arquero tapó justo su remate. Pero en medio de ese desarrollo tranquilo, Ferrari perdió la pelota sobre su sector, y la acción derivó en un penal de Cáceres a Muñoz. El mismo Muñoz se encargó de vencer a Lux con un tiro esquinado.
El técnico Passarella decidió cambiar el esquema para el segundo tiempo. Pusineri ingresó por Patiño, y de esa manera careció de un enlace natural para conducir al equipo. Pusineri y Zapata eran los que trataban de sorprender por los costados, mientras que Santana y Ahumada controlaban la zona central del mediocampo.
De todas maneras, con eso le alcanzó para dominar el partido y sobre todo después del segundo gol de Montenegro, que definió con un remate cruzado, luego de una gran habilitación de Abán. Paulista sólo intentó con un tiro libre de Amaral y un tiro de Wesley que dio en el palo. Abán estuvo cerca de aumentar la diferencia con un cabezazo, pero después se desquitó con un toque suave para marcar el cuarto y cerrar una gran noche.
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