“Estamos mejor parados que los años anteriores.” La frase pertenece a Martín Jaite, director de la Copa Telmex, y es una muestra clara del optimismo que tiene la organización para que ésta sea la mejor de las seis ediciones del torneo. Ni siquiera la baja de David Nalbandian opacó la alegría del ex top ten. “Tenemos otros grandes jugadores, como Coria, Ferrero, Kuerten o Acasuso”, señaló. Tanto optimismo también está reflejado en que la venta anticipada ya dejó agotadas las entradas tanto para las semifinales y final como para la jornada nocturna del viernes. Por eso, la previsión indica que se batirá el record de 59.520 localidades que se vendieron en la edición 2004.

Pero la satisfacción de la organización no pasa sólo por ello. Es que el Buenos Aires Lawn Tennis luce mucho más coqueto que en las oportunidades anteriores, con butacas verdes individuales que reemplazan a los viejos tablones de madera, cuatro tableros electrónicos para los resultados en cada uno de los ángulos del court central –que le dan un toque similar a los grandes torneos del circuito– y mucha más prolijidad en los pequeños detalles, como los planos del club o los programas de partido para el público. La zona del patio de comidas y de los stands de promociones también refleja un gran avance, con más cantidad y variedad. Mucho color y mucho glamour, como para no sólo disfrutar del tenis y las grandes figuras.

La única mancha negra de la primera jornada se dio en la sala de prensa, donde durante muchos pasajes fue imposible conectarse a Internet y hubo algunos inconvenientes con las líneas telefónicas. “Menos mal que Telmex es el principal sponsor del torneo”, fue la ironía más escuchada a lo largo del día.