El director de YPF, Héctor Valle, sostuvo ayer que el Estado, desde que tomó el control de la empresa petrolera nacional, invirtió 2000 millones de dólares. “YPF está demostrando que cuando hay buenos proyectos y atractivos se puede conseguir inversión directa”, aseguró el economista, quien a su vez agregó que ahora es necesario que el sector privado también encare proyectos en el área petrolera y energética. El miércoles se cumplen dos años desde que el gobierno de Cristina Kirchner decidió tomar el control de la compañía, entonces controlada por Repsol.

Valle se mostró conforme con los resultados que viene obteniendo la petrolera desde la nacionalización. “YPF invirtió desde la estatización 2000 millones de dólares, ha hecho un pacto importante con Chevron y está en marcha un nuevo acuerdo; hay un montón de proyectos para Vaca Muerta y otras áreas del país; se ha descubierto un yacimiento muy importante de petróleo no convencional en Río Negro”, remarcó. No obstante, aclaró que YPF es el 32 por ciento de la producción petrolera y 51 por ciento de la comercialización. “Precisamos que el sector privado también encare proyectos en el área petrolera y energética, porque si no no creo que alcance con el esfuerzo de YPF”, sostuvo.

El año pasado, YPF incrementó su producción de crudo un 3,4 por ciento y, la de gas, un 2,2 por ciento, pero eso no alcanzó para revertir la tendencia del conjunto de la industria. De hecho, el sector registró una caída en la producción de petróleo del 1,7 por ciento, mientras que el gas cayó 4,4 por ciento. Es por ello que Valle le apuntó a las empresas privadas. “El sector privado tiene ahora condiciones de precios, condiciones de valores internacionales, de disponibilidad del recurso energético que tendría que convertir en muy atractiva una inversión en Argentina, ya que la tasa de retorno de estos proyectos duplica a la más alta de las tasas de interés”, afirmó.

El director de YPF analizó además la coyuntura política y económica y dijo que en el paro del jueves pasado “no se habló de las patronales ni de los formadores de precios ni de los organismos internacionales, se habló de la responsabilidad del Estado en una crisis que no es tal”. “Todo el apocalipsis anunciado no tiene correlato con lo que es hoy, a mediados de abril, la tendencia de la economía para los próximos meses”, observó. Valle sostuvo que “poco a poco la economía se va reencaminando” y que “las perspectivas para el segundo semestre no son malas; la inflación puede terminar el año sensiblemente por debajo de 30 por ciento, lo cual es un dato alto, pero comparado con los megadatos de la ortodoxia y oposición es un dato razonable y no afectaría el poder adquisitivo”, concluyó.