Desde Mar del Plata

“No podemos decir que está todo bien, pero tampoco el discurso apocalíptico de que está todo mal. Esa visión no la comparto”, señaló ayer el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, durante la apertura del 50 Coloquio de IDEA, que se llevará a cabo hasta mañana en la ciudad de Mar del Plata. El gobernador y precandidato para las elecciones presidenciales de 2015 tomó distancia de las críticas que su presentador, el titular de IDEA, Miguel Blanco, vertió en su exposición. El empresario había señalado que la Argentina requiere de mayor integración y apuntó contra una supuesta falta de apertura del Gobierno para el diálogo y el disenso. “Comparto la idea de integración, pero no el resto. Pero para eso está este espacio”, contestó Scioli, quien destacó los esfuerzos del Gobierno para dejar al país en una situación “inmejorable” en materia de desendeudamiento.

“Estamos ante un país desendeudado y haciendo el mejor esfuerzo para dejarlo en inmejorables condiciones”, afirmó el gobernador bonaerense en clara referencia a la defensa del país en el litigio contra los fondos buitre. La pelea con estos fondos especulativos, la restricción externa de divisas, la suba de precios y las condiciones crediticias para la inversión serán los principales interrogantes económicos que acapararán la agenda empresaria durante una nueva edición del Coloquio de IDEA. Si bien la 50 entrega del foro de lobby empresario que comenzó ayer en la ciudad de Mar del Plata fue anunciado como un espacio de discusión plural, donde se discutirán hasta temas vinculados con el narcotráfico, volverá a ser una plataforma para que los precandidatos a las elecciones presidenciales del año próximo busquen seducir a los casi 1500 directivos presentes. Por su parte, los empresarios buscarán marcarles la cancha a los políticos. En esta oportunidad, los candidatos vendrán con referentes de sus respectivos equipos económicos, quienes buscarán dar respuesta a las dudas empresarias.

El coloquio es un espacio que fue utilizado históricamente como testeo ante empresarios sobre una eventual candidatura a un cargo político. Fue la plataforma de lanzamiento que eligieron en los últimos años, entre otros, el ex presidente Eduardo Duhalde, quien finamente obtuvo el 5,8 por ciento de los votos en las anteriores presidenciales, o Sergio Massa, que en su intervención del año pasado cosechó varias críticas por la falta de propuestas, haber llegado tarde a su exposición con otros candidatos y un comportamiento “demasiado canchero” que los hombres de negocios no perdonaron.

La supuesta delicada situación de las empresas no impidió que se colmaran las instalaciones y que hasta hubiese lista de espera para quienes querían participar. Esta vez los empresarios pagaron 15 mil pesos por invitación –que incluye la asistencia a las ponencias, hospedaje y comidas–, que se suma al aporte de casi un centenar de sponsors que pagarán hasta 150 mil pesos por firma.

En esta edición volverá a haber un panel con precandidatos. Entre los que aseguraron su asistencia al debate político, se encuentran Massa (Frente Renovador), los radicales Ernesto Sanz y Julio Cobos, y el socialista Hermes Binner. Scioli aún no confirmó su presencia para la mesa política, aunque fue el encargado de inaugurar el coloquio, y tampoco está prevista la asistencia del jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri. Entre sus referentes económicos estarán Miguel Bein (economista de Scioli); Alfonso Prat-Gay (de Unen), Francisco Cabrera (del PRO) y Ricardo Delgado (Frente Renovador). El objetivo es abordar la idea de fin de ciclo y la interpelación a los candidatos. Pero podría no ser la última oportunidad, ya que se analiza adelantar la fecha de realización del evento el año próximo pensando en un debate previo a los comicios.

No habrá presencia de funcionarios del gobierno nacional en este espacio, considerado una usina de ideas del establishment empresario. En la apertura, el invitado destacado fue Hernando de Soto, economista peruano, referente neoliberal de la región en los ’90 y autor de un libro sobre estrategias para combatir el crimen organizado. La presidenta de General Motors para la Argentina, Uruguay y Paraguay, Isela Costantini, quien también preside el coloquio, fue la moderadora de la cena de bienvenida en un momento en que el sector automotor está en el centro de las miradas, por la caída de la actividad y del comercio bilateral con Brasil. El humor de los empresarios se medirá hasta el viernes también en los pasillos, donde los directivos dejan entrever en charlas de café sus proyecciones.