La conducción de la UIA se reunió ayer con el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, y le pidió una reducción de impuestos y aportes patronales que tributa el sector. Así lo confirmó el titular de la Copal, Daniel Funes de Rioja, a la salida del encuentro que congregó sólo al sector de empresas más grandes. Prat-Gay desechó una baja de la carga impositiva “debido a que el gobierno no está “en condiciones de resignar impuestos”, justificó, aunque abrió la puerta a una modificación para el año que viene. Por su parte, el dirigente de la UIA y diputado por el Frente Renovador, José Ignacio de Mendiguren, dijo que el tarifazo eléctrico “neutralizó” la quita de retenciones al sector.

La reunión entre la UIA y el ministro tuvo lugar después de que dirigentes industriales advirtieron sobre el riesgo de que la política económica impacte fuertemente en el empleo. Días atrás, el empresario del sector gráfico Juan Carlos Sacco dijo que están en juego 200 mil puestos de trabajo en el sector manufacturero, particularmente en las pymes. Sin embargo, Prat-Gay recibió ayer a los representantes de las grandes empresas. Asistieron por parte de la UIA el presidente Adrián Kaufmann, y los vicepresidentes Daniel Funes de Rioja, Luis Betnaza, Cristiano Ratazzi, Luis Ureta Sáenz, Eduardo Nogués y Miguel Azevedo.

“Esta fue la primera reunión con el ministro, y hubo coincidencia en la necesidad de bajar la inflación para llevarla a niveles razonables, pero donde no hubo acuerdo fue en el tema impositivo”, dijo Funes de Rioja, mientras que el presidente de la UIA, Adrián Kaufmann, agregó que “venimos de cuatro años muy malos, en los que las exportaciones se desplomaron, la industria no creció y no se creó empleo privado”, en línea con el discurso macrista. Calificaron al crecimiento de la inflación como “parte de la recomposición de las distorsiones que había generado el anterior Gobierno” y aseguraron que “hemos sido prudentes con el tema de los despidos en el sector privado, negociando suspensiones rotativas o retiros voluntarios”.

Además del pedido de rebaja de impuestos, los dirigentes señalaron la necesidad de mejorar el acceso al crédito productivo, los problemas en el sector energético y la falta de infraestructura que promueva una mejor competitividad. “El Estado también debe hacer un esfuerzo de bajar los costos del impuesto al trabajo, porque Argentina tiene salarios más altos que Brasil o México”, se quejó Funes, a pesar de que en los últimos meses la devaluación redujo sustancialmente el peso en dólares de los salarios.