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El canciller brasileño, Celso Amorim, reconoció que las asimetrías en el sector automotor entre la Argentina y Brasil se profundizaron. Por ello, en tácito reconocimiento de la posición argentina, no descartó la revisión de la política automotriz del Mercosur, que acordaba la liberación del comercio sectorial a partir del 2006.
“Lavagna nos dijo que no es concebible que Argentina no tenga una industria automotriz. Nosotros estamos de acuerdo con él”, dijo el canciller brasileño en una entrevista publica ayer por el diario Folha de Sao Paulo.
Según Amorim, la revisión del acuerdo, solicitada por el presidente Néstor Kirchner, “es un tema que estuvo, está y estará en las mesas de negociaciones”. También reconoció que no se cumplieron las expectativas de reducción de las asimetrías entre Brasil y Argentina en el sector automotor, sino todo lo contrario.
Cuando el acuerdo fue firmado, en 1994, Brasil tenía el 30 por ciento del mercado de vehículos de Argentina, y este país una participación del 14 por ciento en el mercado brasileño.
Diez años más tarde, el desequilibrio se acentuó y hoy Brasil tiene el 60 por ciento del mercado de la Argentina, cuya participación en Brasil cayó apenas al 2,5 por ciento.
“Todo eso tiene que ser tomado en cuenta, porque las relaciones de Brasil con el país vecino no se resumen a cuestiones puntuales de comercio y deben ser consideradas a mediano y largo plazos”, reflexionó el canciller brasileño. “No se trata de disputar mercado uno con el otro, sino de trabajar, juntos, para disputar los mercados mundiales”, concluyó.
En tanto, en lo que respecta a las ventas en el mercado automotor local, se conoció un informe de la Asociación de Concesionarios de Automotores que muestra un leve cambio en las tendencias de comercialización de vehículos. Los más vendidos ya no son los utilitarios y comerciales livianos, sino los autos particulares, que, en los primeros 8 meses del año, impulsados por los vehículos pequeños y más económicos, representaron el 74,3 por ciento de las ventas. Los utilitarios, en cambio, pasaron del 24,5 por ciento en los primeros 8 meses de 2003 al 18,4 en el corriente año.