EL MUNDO › EE.UU. NO QUISO CEDER Y EL ULTIMATUM VENCE HOY
Ultimas horas del secuestrado
El hasta ahora desconocido “Movimiento Nacional para la Restauración de la Soberanía Nacional de Pakistán”, un grupo político-militar hasta ahora desconocido que se atribuyó el secuestro del periodista estadounidense Daniel Pearl, ayer prolongó un ultimátum hasta el día de hoy, al término del cual amenazan con matarlo si Washington no accede a sus condiciones. Las condiciones son liberar a los paquistaníes presos durante la guerra en Afganistán, confinados en la base militar de Guantánamo, Cuba, lo que el secretario de Estado Colin Powell salió a calificar ayer como “inaceptable”.
El grupo que mantiene secuestrado en Pakistán a Pearl, corresponsal norteamericano del diario Wall Street Journal, envió un mensaje por correo electrónico a la prensa paquistaní en el que decía lo siguiente: “Damos un día más. Si Estados Unidos no cumple nuestras exigencias mataremos a Daniel. Y entonces el ciclo continuará y ningún periodista norteamericano podrá entrar a Pakistán. Alá está con nosotros”. En un mensaje conocido poco antes, el jefe de redacción del Wall Street Journal había urgido al grupo a que liberara a Pearl, afirmando que sus demandas eran imposibles de cumplir, pero sugiriendo que el periodista podía convertirse en un “puente de comunicación entre culturas y civilizaciones diferentes”, en lo que sonó como la oferta de un espacio libre en las páginas del diario tradicional de la city neoyorquina para que los restauradores de la democracia paquistaní pudieran publicar sus demandas.
Powell, por su parte, dijo ayer que Estados Unidos no podrá acceder a las demandas de los secuestradores de Pearl y expresó estar “profundamente preocupado por la seguridad” del periodista y agregó que se está “haciendo todo lo posible por localizarlo”. Daniel Pearl fue visto por última vez el 23 de enero en Karachi (sur pakistaní) cuando intentaba reunirse con gente que podría tener vínculos con la red Al- Qaida del extremista Osama bin Laden, el hombre más buscado por Estados Unidos, que lo acusa de los atentados del 11 de setiembre en Nueva York y Washington. El corresponsal de Wall Street Journal había confiado a su esposa, justo antes de desaparecer, que iba a entrevistar al jefe del grupo radical Tanzeemul Fugra, Mubarak Alí Shan Gilani, con sede en Lahore (este). Este hombre era ayer interrogado por la policía pakistaní.