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Cuántos serán los planes de empleo, cómo se van a distribuir, qué lugar van tener las organizaciones de desocupados. De estas tres cosas se habló ayer en la reunión del presidente Eduardo Duhalde con Luis D’Elía y Juan Carlos Alderete, convocada luego de la masiva marcha de desocupados desde La Matanza a Plaza de Mayo. En el encuentro, según los piqueteros, quedó en limpio que durante el año habrá 500 mil planes; la cifra es sólo la mitad de lo que prometió en diciembre Adolfo Rodríguez Saá, pero más del doble de lo que distribuyó Fernando de la Rúa durante todo el 2001. La discusión sobre cómo se van a asignar esos planes, en cambio, recién empieza.
La entrevista con Duhalde en la Sala de Situación duró una hora y media, en la que los piqueteros trataron de usted al Presidente y recibieron el mismo trato. Se plantearon los siguientes temas:
- Requisitos para acceder a los subsidios por desempleo: hubo un pedido para flexibilizarlos. “Nuestro cuestionamiento es que para acceder a un plan hay que presentar, por ejemplo, la libreta sanitaria de todos los hijos, que en la provincia cuesta 18 pesos cada una”, repasó Alderete. “En muchos casos también es necesario documentar el cambio de domicilio, por lo que hay que pagar ocho. Y quedan sin posibilidades de recibir asistencia los jóvenes, los que no tienen hijos y los mayores de 55 años.” Duhalde les dijo que algunos de estos reclamos le parecían razonables y anticipó que los modificará.
- Planes alimentarios: se realizará una reunión con Chiche en dos o tres días.
- Tarifa social: de energía, gas y agua, para jubilados y desocupados. En estos momentos, después de la comida es el principal problema en las zonas críticas del conurbano. Hay varias propuestas; “en la provincia de Buenos Aires, por cada 100 pesos que se pagan de luz, 42 son de impuestos”, señaló ayer D’Elía, apuntando a la posibilidad de bajar esa tasa.
- Distribución de los planes: es el gran tema a definir entre el peronismo en el poder y las organizaciones de desocupados. El Gobierno impulsa que en todos los municipios se creen consejos de crisis (con los partidos políticos, la iglesia, las ONG y las organizaciones sociales) y que estos consejos definan la entrega de los planes.
Los desocupados plantean que en la práctica están siendo excluidos de estos organismos y están convencidos de que el gobierno busca hacer política social a través de las redes de punteros del PJ y la UCR.
“Los Consejos que ya se crearon están manejados de esa manera”, dijo D’Elía. “Los punteros anotan al por mayor ONG que sólo son sellos, locales donde sólo se juntan para jugar al truco los sábados, y de esa manera manejan las decisiones”.
Duhalde les ofreció sacar un decreto por el cual las organizaciones de desocupados quedarán incluidas en los Consejos. Los piqueteros quieren firmar un convenio nacional entre el gobierno y todas las organizaciones de desocupados del país, que contenga un mecanismo de auditorías y que permita “que en cada barrio en asamblea decida cómo asignarlos”. Aunque ayer no hablaron de cifras, apuntan a acceder al 9 por ciento del paquete de planes, lo que alcanzaría a 45 mil. El porcentaje corresponde a lo que manejaba el conjunto de las organizaciones durante el año pasado.